Omitir para ir al contenido principal

encubrimiento

Jueces de la Cámara de Casación Mariano Borinsky y Gustavo Hornos.

Otro paso en la persecución

Sin profundizar en los argumentos, los jueces de la Sala IV de la Cámara de Casación, Borinsky, Hornos y Gemignani, rechazaron los planteos de las defensas en la causa por el Memorándum con Irán. Ratificaron también las prisiones preventivas.

Por Sebastian Abrevaya
Mullen y Barbaccia estaban acusados por encubrimiento pero el Ministerio de Justicia pidió su absolución.

Sale el abogado pero queda el alegato

La Justicia consideró que José Console estaba inhabilitado para ejercer el cargo. Los familiares de las víctimas criticaron al tribunal porque de todas maneras avaló las bajas penas pedidas para los ex fiscales Mullen y Barbaccia.

Por Irina Hauser
Algunos de los acusados del encubrimiento del atentado: Beraja, Telleldín, Galeano y el Fino Palacios.

Al borde de la anulación

El abogado José Console, quien en nombre del Ejecutivo había pedido penas menores para los ex fiscales Mullen y Barbaccia, es funcionario del Consejo de la Magistratura porteño. El tribunal solicitó información y podría inhabilitarlo.

Por Irina Hauser
Olga y Juan Degtiar y Graciela Linial de Furman con Héctor Timerman en su casa, donde cumple arresto domiciliario.

Un respaldo ante la persecución

Integrantes de la agrupación 18J le expresaron su solidaridad al ex canciller por la acusación de encubrimiento del atentado –que consideran injusta– que pesa sobre él a partir del fallo de la Justicia federal en la causa del Memorándum con Irán.

Por Bárbara Komarovsky
El ex secretario de Legal y Técnica Carlos Zannini fue detenido en la madrugada en Río Gallegos.

Una razzia basada en una guerra con Irán y en el poder “residual”

En el fallo se asegura que los atentados fueron actos de guerra y que los funcionarios colaboraron con el enemigo. Dice que el ex secretario de Interpol “prestó colaboración” en el supuesto encubrimiento. Y afirma que los ex funcionarios tienen poder para obstaculizar la causa.

Por Raúl Kollmann