ECONOMíA › EL SECRETARIO DE INDUSTRIA SE REUNIRá EL PRóXIMO JUEVES CON SU PAR BRASILEñO

Pasaje a Brasilia para seguir negociando

Los gobiernos de Argentina y Brasil acordaron retomar el diálogo hacia fines de la próxima semana. Empresarios de los rubros afectados por el conflicto comercial advierten sobre las consecuencias. Los funcionarios, en cambio, se muestran optimistas.

Los funcionarios de Argentina y Brasil volverán a encontrarse cara a cara el próximo jueves en Brasilia. El llamado telefónico que se esperaba para el lunes o martes finalmente se concretó ayer. De esta manera, el secretario de Industria, Eduardo Bianchi, viajará el miércoles por la noche para continuar con las negociaciones con su par Alessandro Teixeira.

Uno de los temas complejos en discusión son las licencias no automáticas que impuso Brasil a la entrada de autos producidos en el país. Los funcionarios brasileños ofrecieron limitar la demora de las licencias a diez días, propuesta que para la Argentina fue insuficiente. Los empresarios locales aceptarían un plazo máximo de cuatro días. El otro tema ríspido involucra a la producción nacional de maquinaria agrícola, sector al que el Gobierno busca proteger con la imposición de licencias no automáticas que Brasil pide retirar.

Ayer por la tarde, Bianchi recibió la llamada de Tatiana Trazeres, segunda de Teixeira en la cartera de Industria de Brasil. La funcionaria traía la invitación para continuar con las negociaciones en Brasilia, que fue aceptada inmediatamente. De esta manera, Bianchi viajará junto a Adrián Makuc, director nacional de Política Comercial Externa, y Marcelo Marsochini, director de Mercosur e Integración. Si bien la ministra de Industria, Débora Giorgi, sigue de cerca las negociaciones, éstas seguirán a nivel de secretarios, a pesar de algunas críticas del sector empresario. Antes de confirmarse el viaje de Bianchi a Brasilia, el director de Relaciones Exteriores de la poderosa Federación de Industrias de San Pablo (Fiesp), Roberto Giannetti da Fonseca, aseguró que “no existe un buen clima de negocios” entre ambos países y reclamó que se ponga freno a cualquier tipo de trabas y regulación sobre el comercio bilateral.

En cambio, para el ministro de Economía, Amado Boudou, “la controversia no supera el 6 por ciento del total del comercio entre ambos países. Es un problema pequeño en términos del volumen del intercambio”. Se refería a los reclamos de Brasil por las licencias que aplica el país. “No creo que las actuales diferencias comerciales impidan continuar con el proceso de integración entre los dos países. Cualquier obstáculo será superado por la voluntad política de ambos gobiernos”, agregó.

Desde que estalló el conflicto, sólo ingresaron a Brasil aproximadamente 1200 autos y estarían stockeados cerca de 8000. Las fábricas todavía no frenaron su producción, pero reconocen que si las licencias no automáticas llegaran a establecerse en diez días, no tendrían capacidad para almacenar su producción. Llegado ese caso, señalan fuentes del sector privado, probablemente reduzcan su producción en un 20 por ciento, lo que tendría una repercusión directa sobre los puestos de trabajo del sector.

La industria automotriz es la única que mantiene superávit comercial con Brasil, aproximadamente 413 millones de dólares. Sin embargo, si se analiza toda la cadena automotriz-autopartista, el déficit se ubica cerca de los 1900 millones de dólares. Argentina quiere proteger este sector, que es uno de los caballos de batalla de la industria local.

El otro rubro al que se le quiere dar protección es la fabricación de maquinaria agrícola. “Acá es donde necesitamos un régimen especial, porque Argentina tiene mercado interno para profundizar y existe el interés por invertir”, indicaron a este diario desde Industria. Por ejemplo, la empresa de maquinaria agrícola Case New Holland anunció recientemente una inversión para la Argentina de cien millones de dólares que estaba destinada en un principio a Brasil. La discusión de fondo con el mayor socio comercial pasa por establecer nuevas reglas que permitan armonizar el intercambio de bienes.

“Si los brasileños exportan más que los argentinos, que vengan a Brasil y traten de mejorar sus ventas, pero que no pidan trabas”, se quejó el director de la Fiesp. “Si nosotros siguiéramos con más certeza el tratado de libre comercio, este problema no existiría. El tema es que el intercambio comercial no es practicado como se debería”, concluyó Da Fonseca.

Compartir: 

Twitter

Eduardo Bianchi, secretario de Industria, volará el miércoles por la noche hacia la capital de Brasil.
Imagen: DyN
 
ECONOMíA
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.