Acompañando la prosperidad general que se registra en la producción automotriz, la venta de autos usados alcanzó un nuevo record en los dos primeros meses de este año, al totalizar 218.356 operaciones, un 14 por ciento por encima que en igual lapso del año anterior.

La información fue proporcionada ayer por la Cámara del Comercio Automotor y pone en relieve la excepcionalidad de este fenómeno, ya que las mayores ventas tuvieron lugar en un período estival en el que normalmente hay una caída de este tipo de operaciones.

En febrero se comercializó la cifra record de 98.178 vehículos. Justamente, el mes que resultó más pobre tras la última crisis económica: en el segundo mes del 2002 las operaciones apenas habían superado las 34 mil unidades. En rigor, éste no es el primer año de excepción estival, ya que el año pasado se había registrado un record en esta estación con la venta de algo más de 192 mil coches de segunda mano.

Otro dato notorio difundido ayer por la CCA es que Buenos Aires surge como una indiscutida líder de este boom de compraventa de autos usados, si se contrastan estas operaciones con las que tuvieron lugar el año pasado. En la provincia administrada por Felipe Solá, durante el primer bimestre de este año se vendieron 84.454 unidades contra 72.612 del mismo período del 2006.

En segundo lugar se ubica la Capital Federal, donde se comercializaron 27.808 autos contra 25.322 en 2006. En tercer lugar, la provincia de Santa Fe con 20.133 unidades vendidas en el primer bimestre de 2007, contra 18.220 de igual período del 2006; seguida por Mendoza: en el bimestre pasado se comercializaron 13.493 unidades en esa ciudad, contra con las 11.768 del año anterior, según informó aquella Cámara.

Frente a este panorama, los comercializadores de autos usados pronosticaron que este año las ventas de usados crecerán alrededor del 15 por ciento interanual, lo que implica que habrá no menos de 1,4 millón de unidades usadas que cambiarán de manos.