EL MUNDO › ACERCA DE LA SUPUESTA INCURSIóN MILITAR COLOMBIANA EN SU SUELO

Caracas dice tener pruebas

Bogotá negó ayer que sesenta soldados hayan cruzado el límite con el vecino, pero las autoridades venezolanas afirmaron que hay imágenes que así lo demuestran. Es un síntoma más en la tensa relación bilateral.

Colombia desmintió que sus militares hayan ingresado a Venezuela, pero del otro lado de la frontera le respondieron que los tienen fotografiados. El ministro de Defensa de Bogotá, Juan Manuel Santos, negó ayer que uniformados suyos ingresaran en el estado venezolano de Apure, donde, según denunció el sábado Caracas, 60 efectivos se adentraron 800 metros. “Es prácticamente imposible que haya sucedido lo que están diciendo que sucedió”, dijo Santos. Con cara de Poker, el ministro de Comunicación de Venezuela Andrés Izarra respondió que tiene un as bajo la manga: pruebas fotográficas que demuestran la supuesta incursión.

Después de que el fin de semana el presidente colombiano Alvaro Uribe se mostrara despreocupado y descreído de las acusaciones del país vecino, su gobierno negó ayer en forma terminante y a través de distintos representantes lo que puede convertirse en un nuevo síntoma de la crisis que atraviesan las maltrechas relaciones entre Colombia y Venezuela.

El ministro de Defensa fue el primero en salir al cruce. Aunque Venezuela dice que una patrulla suya detectó y detuvo a militares colombianos en suelo ajeno, Juan Manuel Santos defendió a capa y espada a sus militares. Según Santos, el general Freddy Padilla de León comprobó por medio de una investigación que los uniformados de Bogotá nunca traspasaron la línea fronteriza, la que no siempre es fácil de distinguir en medio de la espesa selva. “En ese lugar encontramos una maquinaria venezolana y al menos dos ciudadanos de ese país que están realizando algunos trabajos en territorio colombiano y que no tenían ningún problema en estar allí”, señaló. El funcionario insistió que los militares colombianos no tenían los equipos para pasar el río.

El otro representante colombiano que puso la cara ayer fue el canciller Fernando Araújo. El ministro aseguró que el gobierno de Venezuela no presentó a su par colombiano una nota oficial de protesta por la supuesta incursión de una patrulla militar colombiana a su territorio. “Yo conozco la nota de protesta a través de los medios de prensa. Cuando la reciba la contestaremos formalmente, pero por lo pronto lo que puedo decir es que el informe que tengo de las Fuerzas Militares es que los soldados colombianos nunca atravesaron el río Arauca”, señaló a periodistas. “Tienen información errada”, concluyó sin vacilar.

La contundencia de la respuesta no bastó para convencer al gobierno de Chávez, quien ayer se mantuvo ocupado con su naciente Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y suspendió su habitual programa televisivo y radial “Aló Presidente” en el que se esperaba descargase un nuevo mazazo en su par colombiano Alvaro Uribe.

En su reemplazo, el ministro venezolano de Comunicación se encargó de derribar la versión de Colombia. “El ministro Santos parece que no está bien informado de lo que hacen sus tropas o se hace el que no está bien informado, quién sabe con qué fines”, dijo Izarra al canal estatal Venezuela Televisión. Y luego aseguró que cuenta con imágenes para demostrar la presunta violación territorial. “Tenemos material gráfico, fotos y otros materiales que van a ser presentados a la opinión pública, que demuestran la incursión de este grupo de militares colombianos en nuestro territorio”, dijo. Así, Venezuela se convirtió de acusado en acusador, en momentos que Colombia afirma que su vecino financió a las FARC en base a supuestas pruebas encontradas en una computadora sustraída a la guerrilla.

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Soldados colombianos camuflados habrían traspasado el límite.
Imagen: AFP
 
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