EL MUNDO › EN CHILE, EL CANDIDATO PIñERA SE ASUME INOCENTE

El pasado que condena

El ex juez chileno Luis Correa Bulo confirmó que una ministra de Pinochet lo presionó en 1982 para evitar que enviara a la cárcel a Sebastián Piñera, entonces gerente del Banco de Talca.

El candidato de la derecha chilena estuvo en problemas... pero la dictadura lo rescató. Un ex juez chileno confirmó que una ministra de Pinochet lo presionó en 1982 para evitar que enviara a la cárcel al empresario Sebastián Piñera –hoy candidato de Alianza por Chile– por la quiebra de un banco. Piñera aseguró su inocencia y apuntó a su rival de la oficialista Concertación, Eduardo Frei, insistiendo en que se trata de una “campaña sucia”.

En declaraciones publicadas ayer por el diario La Nación de Santiago, el ex magistrado Luis Correa Bulo ratificó que Mónica Madariaga, ministra de Justicia de Pinochet, lo llamó para pedirle que no encarcelara a Piñera, entonces gerente del quebrado Banco de Talca y hermano del ministro de Trabajo de aquella época, José Piñera. El caso había sido denunciado semanas atrás por la propia Madariaga y, tanto entonces como ayer, el candidato lo desmintió.

Piñera señaló que la exigencia de Frei de aclarar los sucesos que lo involucran cuando era gerente del citado banco “no tiene validez, ya que fue él mismo (Frei) quien después designó a Carlos Massad como ministro de Salud y presidente del Banco Central”. Massad se había desempeñado como presidente del Banco de Talca durante el episodio en que el mismo candidato de la Concertación ha llamado a “transparentar”.

En esa línea, el presidenciable repartió dardos: “No me parece bien esta campaña sucia que ha iniciado Frei, de la mano de una ministra del gobierno militar y de un juez que fue destituido del Poder Judicial por sus propios pares”.

El ex juez Correa Bulo fue pieza fundamental a fines de la década del ’90 –como presidente de la Sala Penal de la Corte Suprema– para reabrir todas las investigaciones por violaciones de los derechos humanos.

En ese contexto debió enfrentar una acusación constitucional, que fue rechazada en la Cámara de Diputados, y cargos por irregularidades en la Corte Suprema que fueron levantados en una instancia por la Comisión de Etica.

Fue marginado del Poder Judicial en 2001 luego de que el pleno del máximo tribunal estimara que había tenido reiteradas conductas reñidas con la ética (supuesto tráfico de influencias). Todo es analizado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Piñera es candidato a presidente por una coalición de derecha opositora al gobierno de la Concertación. El empresario, accionista de LanChile, es poseedor de una fortuna estimada en 1300 millones de dólares y junto a los empresarios Anacleto Angelini y Eleodoro Matte comparten un privilegiado puesto entre los más ricos del mundo, según un ranking elaborado por la revista Forbes en 2007. El oficialismo le pide que transparente el origen de su fortuna y, ante la quiebra del Banco de Talca, el democristiano Juan Carlos Latorre enfatizó en que este hecho se debió a que Piñera “construyó una sociedad de papel”, realizando préstamos a empresas que finalmente no pagaron sus deudas al banco.

El candidato millonario encabeza las encuestas de intención de voto para las elecciones de diciembre próximo. El último sondeo conocido, publicado ayer por el diario La Tercera, asigna para la primera vuelta a Piñera 30 por ciento de intención de voto; al oficialista Eduardo Frei (quien ya fue presidente entre 1994 y 2000), 25 por ciento, y al oficialista disidente Marco Enríquez Ominami, 21 por ciento. Con respecto a la última encuesta similar, efectuada en abril, Piñera perdió cinco puntos porcentuales y Frei tres, en tanto Enríquez Ominami ganó 11 puntos. Para la eventual segunda vuelta, que se realizará en enero, Piñera derrota a Frei por 46 a 22 por ciento, y a Enríquez Ominami por 49 a 22 por ciento. No obstante, el aspirante conservador es quien reúne el mayor porcentaje de respuestas afirmativas a la pregunta de si “en ningún caso” votarían por él, con 41 por ciento.

La Concertación, cuyos principales integrantes son los partidos Demócrata Cristiano –al que pertenece Frei– y Socialista –del que forma parte la presidenta Michelle Bachelet–, gobierna ininterrumpidamente desde 1990, cuando Chile recuperó la democracia tras la dictadura encabezada por Pinochet desde 1973.

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Sebastián Piñera (der.) formó junto a Joaquín Lavín el grupo de derecha Alianza por Chile.
Imagen: EFE
 
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