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Claves

- La Kabul de posguerra vivió ayer su primer partido de fútbol desde que los talibanes tomaran el poder y convirtieran los partidos en escenario de ejecuciones, amputaciones de miembros y exclamaciones colectivas de fe. Durante esa época, los jugadores eran obligados a salir a la cancha cubiertos de pies a cabeza.
- El equipo afgano perdió 3 a 1 contra un seleccionado británico reclutado entre las fuerzas de mantenimiento de la paz, pero eso no pareció importar a los nativos del lugar.
- Lo que sí fue preocupante es una violencia que tiende a crecer y que el gobierno parece ser incapaz de controlar.

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