El plenario de la militancia realizado el domingo en el Mercado Central consiguió generar el efecto que buscaba en las distintas vertientes del oficialismo. En el encuentro se avanzó en la importancia de “fortalecer la concepción del proyecto, la consolidación de nuestro espacio y la conducción estratégica de Cristina”, señaló el diputado y secretario general de La Cámpora, Andrés Larroque, mientras que el ministro de Defensa, Agustín Rossi, apuntó que “el debate ideológico tiene que preceder al electoral”. El secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, destacó que se trató de “una juventud pensando en el futuro y en cómo hacer que estas políticas continúen en el tiempo”.

“Es importante generar espacios que demuestren que hay sectores que están dispuestos a dar pelea por una Argentina más justa”, señaló apuntando al futuro el diputado Larroque. El encuentro, que reunió a más de quince mil militantes kirchneristas que debatieron mano a mano con funcionarios, gobernadores, intendentes y legisladores, “militantes con más responsabilidades” como gustan llamarlos, cumplió las expectativas de los organizadores que todavía tienen en sus manos analizar los debates y las intervenciones para sintetizar las conclusiones en los próximos días. Rossi explicó que “lo que quedó claro es que hay un primer debate que los militantes del kirchnerismo tenemos que llevar adelante, que es el de las ideas, el debate ideológico”.

El plenario de la militancia que sesionó en Tapiales el domingo conmemoró una fecha de relevancia para el kirchnerismo como el 27 de abril, once años después de que Néstor Kirchner quedara segundo en la disputa electoral con Carlos Menem por la presidencia, en 2003. Los once años siguientes revitalizaron la discusión y la acción política, además de concentrar a distintos sectores que se encontraban dispersos después de la debacle que dejó el neoliberalismo y que culminó con la crisis del 2001. A partir de allí, el kirchnerismo se transformó en el catalizador de las expresiones que se habían enfrentado al modelo de los ’90, así como al centroizquierda que quedó desangelado después del fracaso del gobierno de la Alianza. Los espacios del kirchnerismo confluyeron en el Mercado Central para evaluar y debatir las políticas implementadas bajo los gobiernos de Kirchner y Cristina Fernández.

“Recordarlo con miles de jóvenes discutiendo y analizando las políticas que vienen y los desafíos por delante es uno de los homenajes que mejor podemos hacerle a Néstor Kirchner, porque es lo que él pregonaba”, sostuvo Parrilli y destacó el “orgullo” que sentía el kirchnerismo no sólo por poder “mostrar once años de realizaciones y gestiones”, sino también por la existencia de “una juventud pensando en el futuro y en cómo hacer que estas políticas continúen en el tiempo”.

Otro que estuvo presente en la jornada de deliberación fue el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, que aseguró que “sin dudas, las políticas de Estado implementadas por Néstor y Cristina Kirchner son trazos orientadores de este cambio de época que explican el resurgimiento del nacionalismo en la Argentina”.

El dirigente del Movimiento Evita y legislador bonaerense Fernando “Chino” Navarro destacó que con el encuentro militante “se empieza a gestar una nueva instancia de unidad más amplia, más diversa, más heterogénea, en el seno del movimiento nacional”. A modo de reflexión, Navarro aseguró que “para llegar al 2015 con las banderas en alto y construyendo más y mejores derechos, y dar una batalla política, se requiere de grandes mayorías con participación de trabajadores, intelectuales, pequeños y medianos empresarios, productores, la juventud y mucha militancia”, y agregó que el domingo “se relanzó esa idea de gran mayoría”.