EL PAíS

De ordinario a sumarísimo

La jueza María José Sarmiento aclaró ayer que la causa sobre la destitución de Martín Redrado de la presidencia del Banco Central no pasó a tener un trámite “ordinario”, sino que ahora tiene la modalidad de un “juicio sumarísimo”. Esto, dijo la magistrada, acorta los plazos procesales, aunque admitió que los tiempos son más largos que los de una acción de amparo, que la obligaba a resolver las apelaciones en 48 horas. A los abogados de Redrado, explicó, les dio 24 horas para adecuar su demanda. Sarmiento tomó esa decisión el lunes, el mismo día que sí transformó en un juicio común, de plazos más prolongados, la acción de amparo presentada por un grupo de diputados de PRO y de la Coalición Cívica que llevó a que congelara el Fondo del Bicentenario, por el cual se destinarían reservas al pago de la deuda. La magistrada explicó que una de las particularidades del juicio sumarísimo es que se invita a las partes –en este caso Redrado y el procurador del Tesoro, Osvaldo Guglielmino– a “una conciliación o a encontrar otra forma de solución” al conflicto. Esa audiencia se prevé para diez días después de que se agota el procedimiento inicial de la causa. La mayor celeridad del procedimiento está dada porque los plazos para cada presentación son de tres días, excepto el de contestación de la demanda y de fundamentación de la apelación, que son de cinco días.

Compartir: 

Twitter

 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.