El gobierno de la provincia de Buenos Aires eliminó los planes de estudio de los cuatro primeros años de las escuelas nocturnas 1 Rodolfo Walsh de Miramar y del primer año de la escuela 2 de la localidad de Otamendi. La medida implica que, una vez egresados los estudiantes que cursan los últimos años, los establecimientos serán cerrados. Por esta disposición más de 200 alumnos quedaron sin escuela y unos 120 docentes sin sus puestos de trabajo, dado que no fueron reubicados en otras instituciones. 

El bloque de concejales de Unidad Ciudadana-FpV-PJ de General Alvarado presentó ayer un proyecto de resolución para que la medida se tratara en el Concejo Deliberante y para solicitarle al gobierno de María Eugenia Vidal que diera marcha atrás con la disposición. Por el mismo reclamo, los concejales del Frente Renovador hicieron un pedido de informes al Consejo Escolar local. 

“Lo más terrible de todo esto es que nos enteramos de la medida en marzo, al borde de empezar las clases. Ni los alumnos, ni los docentes, ni los inspectores sabíamos de esto antes”, dijo a PáginaI12 la inspectora de secundarios del municipio de General Alvarado Paula Aguado Casal. El argumento que esgrimió el gobierno provincial para la cancelación de los cursos, que terminará con el cierre de los establecimientos, fue el mismo que utilizó para el cierre de las dos escuelas en el Delta y de las 39 escuelas rurales: se trata de un “plan de reordenamiento y optimización de recursos”. La inspectora, que fue docente y directora de la Secundaria Rodolfo Walsh, explicó que “los docentes de estos cursos, alrededor de cien en la Secundaria 1 y veinte en la secundaria 2, no saben si van a ser reubicados y los alumnos mayores de 18 años no están inscriptos en ninguna otra escuela. En este momento todos ellos están como en un limbo”. Aguado Casal remarcó que en General Alvarado no existen otros centros de enseñanza para adultos, de modo que los estudiantes de la Rodolfo Walsh que fueron desplazados no podrán terminar su educación secundaria en ese distrito. 

En esa situación se encuentran más de 40 alumnos y alumnas de la Secundaria 1 y unos 30 en la Secundaria 2. “Este fue el número de estudiantes que se llegó a anotar en diciembre, pero muchos no llegaron a anotarse porque en febrero nunca abrieron las inscripciones, por lo cual seguramente hay más personas afectadas”, aclaró la inspectora. “Para ellos no hay ningún plan desde el gobierno provincial, realmente no sabemos que va a pasar”, añadió. 

En el caso de los alumnos menores de edad, la inspectora sostuvo que la Dirección de Secundarios planteó que podrán cursar los primeros tres años en el transcurso de un año, en “aulas de aceleración”. “Desde la dirección indicaron que como máximo habrán dos aulas de este tipo por establecimiento, que de ninguna manera son suficientes para la cantidad de chicos afectados”, señaló Aguado Casal. La inspectora precisó que en la Secundaria 1 hay anotados más de 50 alumnos menores, mientras que en la secundaria 2 hay 25.”Es una situación bastante angustiante para las comunidades educativas. Hemos intentado comunicarnos con representantes del Ministerio de Educación de la provincia, respetando los órdenes de comunicación protocolares, pero no obtuvimos respuesta de ningún tipo”, agregó. 

Los concejales de Unidad Ciudadana-FpV-PJ de General Alvarado denunciaron a través del proyecto de resolución que “la decisión de María Eugenia Vidal lesiona el derecho a la educación de la población de las comunidades afectadas bajo argumentos presupuestarios de manera inadmisible”. “Los Bachilleratos Nocturnos son el espacio educativo para ofrecerle una oportunidad a aquellos adultos que por necesidad deben trabajar para poder mantenerse (a ellos mismos y a sus familias) y darles un espacio donde poder educarse”, apuntaron luego y agregaron que “la comunidad educativa en su conjunto se encuentra consternada por la medida y exige al ejecutivo de la provincia que de marcha atrás con la política de ajuste y achicamiento de la educación pública”. A través del documento, los concejales solicitaron a las autoridades provinciales “retractarse de la mencionada medida tomada en relación al cierre de los Bachilleratos Nocturnos”. 

“La escuela nocturna Rodolfo Walsh fue pionera en Miramar en lo que fue la educación provincial gratuita”, contó a este diario el periodista de la ciudad costera Alberto Pensotti. “Empezó a funcionar hace más de 25 años y le dio la oportunidad a muchísimas personas de terminar la escuela, por eso es muy querida en Miramar”, agregó. Según recordó, el establecimiento se abrió en 1991, “gracias al enorme trabajo de la docente Delia Mariño, de su insistencia y de todos los trámites que tuvo que hacer para lograr su fundación”. Pensotti denunció que el director de la escuela, Saúl Trejo, pidió licencia de su puesto en diciembre para asumir como concejal de Cambiemos en General Alvarado. 

“La escuela siempre tuvo una currícula muy alta y todavía la tiene. Hubo una reacción muy fuerte en Miramar cuando nos enteramos de la medida”, sostuvo el periodista. El lunes a las 19 los padres y madres, alumnos, docentes, directivos y vecinos harán un abrazo solidario a la escuela para  reclamar que no sea cerrada. 

Informe: Juan Funes.