La militante Manuela Hoya viene acompañando a las 700 mujeres que sufren hoy por la decisión del gobierno de Cambiemos de desactivar el programa Ellas Hacen. “Es importante recordar que existe un convenio marco, que se firmó en diciembre del 2014, entre Desarrollo Social de Nación y los Ministerios de Economía, Infraestructura, Desarrollo Social y Salud de la provincia de Buenos Aires”. Desde la asunción del gobierno actual “ese convenio se está incumpliendo con las chicas del Ellas Hacen, porque se fijaba un plazo de 15 meses para la finalización de las obras, con posibilidad de una prórroga, pero nada se ha hablado sobre esa posibilidad y en este momento, ni el Estado Nacional ni el Provincial dan ninguna respuesta”.

“El Estado invirtió mucho dinero en la capacitación de las mujeres del Ella Hacen, invirtió también en materiales para la construcción de las casas, pero sobre todo invirtió en que las mujeres pudieran tener una identidad propia, autoestima, que pudieran pensar en el sueño de tener una casa propia, y es necesario hablar de esas inversiones que hizo el Estado y que no se materializan sólo por el dinero invertido sino por los horizontes que se abrieron y que hoy los están cerrando”. Hoya resaltó que “lo que más preocupa es que sea una mujer, la ministra de Desarrollo Social (Carolina Stanley), la que está clausurando la posibilidad de que estas mujeres puedan realizarse no sólo profesionalmente sino a nivel familiar, tener sus casas, su trabajo y poder pensar en tener un futuro mejor, eso es lo más preocupante”.

“Les prometieron llevar un listado de las adjudicatarias de las casas y firmar un nuevo convenio, de manera que es bastante cínico que las hagan esperar y que no les den soluciones concretas cuando ellas se han capacitado y trabajado mucho”. La situación es dramática si se tiene en cuenta que “muchas de las beneficiarias fueron víctimas de la trágica inundación del 2 de abril de 2013 en La Plata y que en muchos casos son mujeres que se han quedado solas, que tienen hijos a cargo, y que han padecido o padecen de la violencia de género, de la violencia machista”. 

Hoya resaltó que un caso paradigmático es el de Johana Ramallo, la joven de 23 años que está desaparecida desde el 26 de junio del año pasado. “Ella estaba en el programa Ellas Hacen y frente a la situación actual, se inscribió en el marco de la prostitución frente al desarme de un programa que no se relacionaba sólo con la construcción de viviendas, sino que contaba con el aporte de psicólogas sociales, es decir que daba contención y también les permitía a las beneficiarias terminar sus estudios secundarios para producir un cambio positivo en sus vidas”.