Diputados y senadores de la oposición criticaron el veto de Mauricio Macri a la expropiación del hotel Bauen, y aseguraron que están dispuestos a votar nuevamente la ley para ratificarla. Para esto necesitarán reunir una mayoría especial de dos tercios en las dos Cámaras, lo que consideran viable políticamente. Los trabajadores preparan para mañana una conferencia de prensa, con el objetivo de hacer visible el arco de apoyos que los acompaña. 

“La insistencia es un remedio constitucional. Con el Bauen, además, soy optimista porque es una lucha de muchísimos años. Los trabajadores son los que mantuvieron el valor de las instalaciones y de la marca, y ha sido de una insensibilidad total vetar la expropiación”, dijo a PáginaI12 Héctor Recalde, jefe del bloque del FpV-PJ en Diputados. En el mismo sentido, el senador Juan Manuel Abal Medina aseguró que “reunir los dos tercios es complejo pero no imposible”.

Tras la medida firmada por Macri, los 130 trabajadores del Bauen quedan en una situación muy complicada jurídicamente, en peligro de desalojo. “La orden se había detenido pero el veto quita argumentos como para seguir deteniendo la restitución del inmueble a Mercoteles”, indicó Federico Tonarelli, vicepresidente de la cooperativa. Ayer, los trabajadores  se reunieron con Abal Medina y otros legisladores.

Los cuestionamientos que salieron de allí coincidieron en señalar lo endeble de los argumentos para el veto. “El proceso expropiatorio implicaría un severo perjuicio en la posibilidad de asignar por parte del Poder Ejecutivo nacional los recursos económicos disponibles a otras necesidades básicas insatisfechas para el conjunto de la población”, argumentó Macri.

Sin embargo, el diputado Carlos Heller (Partido Solidario), aclaró que el Estado no deberá pagar la expropiación –o en el peor de los casos, debería hacerlo sólo parcialmente– porque los antiguos dueños construyeron el hotel con créditos de banca estatal que nunca cancelaron. “Sería un contrasentido que el Estado renuncie a cobrar sus créditos”, advirtió. Entre los que también se expresaron dispuestos a votar nuevamente estuvieron además Victoria Donda, Marcos Cleri, Pino Solanas y  los diputados del Frente de Izquierda (FIT). 

Desde las pequeñas y medianas empresas, Eduardo Fernández (Apyme) señaló que lo esgrimido por Macri “no se corresponde con la realidad, porque bien decía la ley que era para saldar deudas que los dueños originales del hotel habían tomado con el Banco Nacional de Desarrollo”. En el mismo sentido, Héctor Polino (Consumidores Libres) sostuvo que los trabajadores “han demostrado que son capaces de gestionar con eficiencia el hotel que fue abandonado por sus antiguos dueños en plena crisis del 2001”.