Otro joven religioso que cursó en el Instituto Discípulos de Jesús San Juan Bautista, en Salta, denunció por abuso sexual al padre Agustín Rosa, quien se encuentra detenido desde la semana pasada a raíz de las acusaciones de otros dos ex integrantes del instituto religioso que también habrían sido abusados por el sacerdote entre 2009 y 2013. Voceros del Ministerio Público de Salta informaron que a partir de esta nueva denuncia la fiscalía interviniente podrá ampliar la imputación que pesa sobre el cura. Hoy prestará declaración la ex monja Valeria Sarza, de 43 años, una de las primeras en denunciar a Rosa, quien sostuvo conocer lo que pasaba adentro del instituto y habló de “muchos otros casos de abusos”, según informaron a este diario fuentes de la fiscalía a cargo del caso.
“El lunes se presentó ante la Oficina de Orientación y Denuncias de Salta un joven de 20 años, que vive en Buenos Aires, para denunciar al cura Agustín Rosa por abuso sexual”, indicaron a PáginaI12 voceros de la Fiscalía Penal 2 de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, a cargo de María Luján Sodero. Según la mismas fuente, el joven acusó además a “otro religioso que en ese momento vivía en el sur del país”.
El nuevo testimonio se suma al de Sarza, y al del ex novicio Yair Gyurkovitz, de 21, quienes fueron los primeros en denunciar los abusos sexuales ocurridos entre 2009 y 2013 por parte de los curas Agustín Rosa y Nicolás Parma, ambos de la Iglesia de la Santa Cruz, ubicada en la capital salteña. “Entre hoy y mañana se define si se amplía la imputación a Rosa, agregando la denuncia del joven que se presentó el lunes”, detallaron fuentes de la fiscalía. Rosa se encuentra desde el martes alojado en el hospital del penal salteño de Villa Las Rosas por decisión de la jueza de Garantías 1, Ada Zunino, quien deberá definir la prisión preventiva del sacerdote.
“El relato del joven es muy similar a lo que contó Yair, pero a diferencia de éste, el nuevo denunciante fue abusado sólo una vez”, afirmaron las mismas fuentes. El joven relató que cuando era adolescente estaba alojado en una sede del Instituto Discípulos de San Juan Bautista en el sur del país, en donde fue abusado por un sacerdote que actualmente está siendo investigado. Ante esta situación, se trasladó a Salta en busca de contención, y allí se cruzó con Rosa, el fundador del Instituto, que también abusó de él.
Hoy prestará declaración la ex monja Valeria Sarza. “El testimonio de Sarza es fundamental porque conoce lo que pasaba en el Instituto, habló de muchos otros casos de abusos, y aportó información sobre testigos que actualmente están en otros países”, explicaron voceros de la fiscalía, y señalaron que “estos testigos podrían ser víctimas aunque no hayan presentado denuncias”.
Otra línea de investigación importante para la causa es la información obtenida en octubre del año pasado por una comitiva del Vaticano que viajó a Salta para investigar supuestos delitos de Rosa, y que motivó el apartamiento del cura de la Iglesia de la Santa Cruz. Sin embargo, el Arzobispado de la provincia le niega estos datos a la fiscal Sodero: “nunca hicieron llegar la información. La fiscal está haciendo todo lo posible para que se la provean, y deben hacerlo por la gravedad de los hechos”, aseguraron voceros de la fiscalía.
