Un paro sorpresivo de choferes de cinco empresas del transporte de larga distancia dejó a cientos de pasajeros varados en la Terminal de Ómnibus de Rosario. Los trabajadores denuncian que las empresas Chevallier, Pullman, Urquiza, Sierra de Córdoba y Argentina, parte del holding que tiene a Flecha Bus como nave insignia, quieren pagar el sueldo en cuatro cuotas. La gota que colmó el vaso fue que, también, abonaron el medio aguinaldo en tramos. Los choferes advirtieron que si en el transcurso de la vispera  no depositaban el total del salario correspondiente a julio, continuarán con la medida de fuerza. Detrás del paro asoma una crisis profunda en la actividad. Orlando Debiasi, director de la Terminal de Omnibus Mariano Moreno, afirmó que los viajes diarios en Rosario se redujeron a casi la mitad en los últimos años. “Este paro fue sorpresivo pero a nosotros no nos sorprende porque venimos viendo en nuestras estadísticas que día a día se van cayendo servicios. De tener 1.100 por día en el año 2010 en esta terminal hoy estamos en 650, 670”, señaló Debiasi, para quien el retiro de subsidios al transporte decidio por el gobierno de Mauricio Macri resintió la actividad. Pero el trio de gracia fueron las low cost, las aerolíneas de bajo costo que restaron pasajeros de larga distancia. “Después de los 500 kilometros  la mayoria elige el avión “ dijo el funcionario.

El titular de la terminal dijo que el conflicto por salarios adeudados a los trabajadores se puede replicar en otras formas ya que forma parte “del problema del transporte terrestre”.

“La situación se ha agravado por la quita de subsidios por parte del gobierno nacional y por este nuevo actor que tenemos en el país que son las aerolíneas low cost (bajo costo), que por las tarifas que publicitan van a ser un golpe durísimo para las empresas de larga distancia”, describió.

Para Debiasi, “estos problemas se van a agudizar y se van a generalizar” y “lamentablemente” otras firmas también pueden tener problemas como las que pararon este miércoles.

“Estas son las empresas más grandes, estas cuatro tienen un servicio cada media hora o 20 minutos, es un movimiento muy intenso para la terminal, pero otras empresas van a tener el mismo problema de no pagar los sueldos”, anticipó.

El funcionario alertó: “La cantidad de servicios se ha caído grandemente y encima la competencia desleal de las low cost con sus precios perjudica”.

El conflicto está centrado en Flecha Bus, la compañía que ostenta la mayor porción del mercado en el rubro. La firma de los hermanos Guillermo y Raúl Derudder hace un tiempo que proclama una crisis en el transporte por tierra que adjudica a la irrupción de las líneas aéreas de bajo costo y el retiro de subsidios nacionales. Y su propio ajuste lo descarga en las espaldas de siempre, la de sus trabajadores. El gremio de los choferes UTA Entre Ríos denunció este mismo miércoles que la el holding despidió a cuatro empleados del taller que tienen en Paraná. El secretario gremial del sindicato, Sergio Groh, coincidió con la patronal ante una consulta de la agencia APFDigital: “El servicio de colectivos de larga distancia está pasando por un muy mal momento debido a la quita de subsidios por parte del gobierno nacional y la competencia con los vuelos de bajo costo. Lamentablemente, las líneas de larga distancia están perdiendo mucho terreno y muy rápido, por lo que sólo quedarán las provinciales”. El dirigente gremial planteó la posibilidad de más cesantías. “Muchas (empresas) están levantando servicios. La última fue Costera Criolla, que decidió sacar de circulación el tramo hasta Bariloche”, puso como ejemplo.