”El aborto clandestino mata”, decía el cartel que desplegaron ayer en el pasaje Juramento cientos de mujeres convocadas por la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito de Rosario. Tras la muerte de Elizabeth, una mujer de 34 años que vivía en José León Suárez, como consecuencia de un aborto realizado con un tallo de perejil, en las máximas condiciones de precariedad; Rosario sacó una vez más los pañuelos verdes a la calle, para reclamar por la legalización del aborto.

La manifestación se desarrolló desde las 17.30 en el Monumento a la Bandera y fue convocada luego de conocerse que una mujer murió en la provincia de Buenos Aires. Elizabeth se sometió a un aborto clandestino, en su casa, y sufrió una infección generalizada. Llegó el domingo 12 a la noche al hospital Belgrano, en la localidad de San Martín, donde le practicaron una histerectomía de urgencia que no fue suficiente para salvarle la vida. Elizabeth fue trasladada a un centro asistencial de mayor complejidad, donde falleció. Tenía un hijo de dos años.