Finalmente, la autopista ribereña, que unirá la Ricardo Balbín (Buenos Aires-La Plata) con la Illia, correrá en trinchera por Puerto Madero y será de uso exclusivo para camiones y micros de larga distancia. Los autos irán por las avenidas Alicia Moreau de Justo y Huergo-Madero, cada una de ellas con cuatro carriles en un solo sentido. El conjunto conformará un corredor vial denominado Paseo del Bajo. La obra fue presentada ayer por el presidente Mauricio Macri, quien advirtió que por los trabajos la ciudad “va a ser un lío tremendo en estos dos años y medio”.

El proyecto consiste en la creación de un corredor vial que tendrá más de seis kilómetros, entre Moreau de Justo y Huergo-Madero. Los cuatro carriles exclusivos para camiones y micros de larga distancia permitirán circular más rápido, con acceso directo al puerto y a la Terminal de Retiro. Contará con ocho carriles para vehículos livianos, cuatro en sentido norte y cuatro en sentido sur.

La traza comenzará al sur de la ciudad en el empalme con las Autopistas 25 de Mayo y Ricardo Balbín (Buenos Aires-La Plata), desde donde partirán ramas de vinculación. Estas se construirán con la tipología de viaductos, e irán descendiendo hasta alcanzar el terreno, aproximadamente a la altura de Carlos Calvo, donde la traza comenzará a enterrarse para transformarse en trinchera, por donde circulará el tránsito de vehículos pesados, manteniendo los carriles de vehículos livianos a nivel.

Al cruzar la avenida Belgrano, la traza de la trinchera se desviará para ubicarse parcialmente debajo de Alicia Moreau de Justo. Ese trayecto será mayormente una trinchera cubierta y semicubierta hasta Córdoba.

Luego, la traza continuará por un falso túnel que se creará a la altura de Dársena Norte, sobre cuya cubierta se levantará un parque tipo terraza verde que se constituirá en un nuevo espacio de esparcimiento.

Ya en avenida Ramos Mejía, comenzará a subir hasta emergerá a la superficie, donde se desarrollará un sector a nivel para el ingreso y egreso a la Terminal de Omnibus.

Luego continuará en un viaducto elevado, con conexión al Puerto, sobre las avenidas Antártida Argentina y Castillo, hasta su empalme Norte con la Autopista Illia, a la altura del Peaje Retiro.

La trinchera para vehículos pesados tendrá dos carriles de circulación por sentido, cada uno de 3,50 metros de ancho y 5,10 metros de altura libre de paso; contará con banquinas y sobreanchos de seguridad.

Para quienes se trasladan en auto, las avenidas Alicia Moreau de Justo (con cuatro carriles de circulación sentido norte) y Huergo (con cuatro carriles de circulación sentido sur) tendrán mayor fluidez, lo que mejorará la seguridad vial y acortará los tiempos de viaje.

Además, se dispondrán cruces transversales que permitirán la circulación entre microcentro y Puerto Madero en las calles: Estados Unidos-Independencia, Belgrano-Moreno, Perón-Corrientes-Lavalle y Córdoba-Viamonte. El proyecto creará 60.000 metros cuadrados de nuevos espacios verdes, y contendrá también una nueva red de ciclovías, integrada a la actual.

La obra será realizada por el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte a través de la empresa estatal Autopistas Urbanas junto con la Corporación Antiguo Puerto Madero, que tendrá a cargo los trabajos en superficie.

Macri encabezó el acto de inicio de las obras junto a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. “Por algo se pensó y se planeó durante 50 años, porque es absolutamente fundamental y todos sabemos de la importancia del puerto de Buenos Aires y de la conectividad con la Capital”, aseguró.

“Ya sabemos lo que es cruzar el área metropolitana de norte a sur, y lo que es para los productores llegar al puerto desde sus provincias; esta obra, cuando esté funcionando, va a generar trabajo para millones de argentinos”, enfatizó. Al respecto, el jefe de Estado aclaró que “va a ser un lío tremendo la Ciudad en estos dos años y medio, pero ustedes lo han visto, pasa mucho más rápido de lo que uno imagina”. “Saber que los muchachos van a estar trabajando para algo que, cuando termine, nos cambia la vida a todos, nos va a generar la paciencia suficiente como para acompañar los años de obra”, concluyó.

Rodríguez Larreta recordó que en su momento se conoció a este proyecto como la “autopista ribereña”, pero ahora adoptó la denominación de Paseo del Bajo, ya que se le incorporó la creación de un área de espacios verdes con una superficie equivalente “a dos veces” el tamaño del Parque Lezama.