Al repudio de las organizaciones de derechos humanos por la represión a miembros de la comunidad mapuche Pu Lof, del departamento chubutense de Cushamen, se sumó la voz de la titular de Asociación de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, quien adelantó que “tratará de organizarse” en los próximos días para viajar hasta allí y “darles una mano” en su reclamo por territorio de propiedad ancestral, en manos del grupo Benetton.

“Estoy avergonzada de vivir en un país donde está pasando lo que pasa”, remarcó la dirigente a través de un video en el condenó los ataques con balas de goma a hombres y mujeres de esa comunidad, y golpeó a niños.

 

 

 

Hubo dos operativos de represión entre el martes y el miércoles y permanecen aún detenidas tres personas en la Unidad Penal 14, acusadas de resistencia a la autoridad, obstrucción de vías y abigeato.

 

“Estamos viejas pero todavía podemos caminar y andar en avión”, expresó Bonafini y prometió que ella, junto con otras integrantes de la organización de derechos humanos, “seguramente llegaremos, si es necesario, hasta allí para darles una mano”. “Ahí también nos van a conocer quiénes somos las Madres”, sentenció.

 

Le pidió también a “los queridos compañeros” mapuches de Cushamen que “por favor sigan resistiendo” y que “no abandonen la lucha porque no están solos”. Bonafini adelantó que las Madres de Plaza de Mayo tienen intención de publicar el próximo domingo “una carta muy importante” en la que expresarán su posición al respecto.

 

“Sepan que no están solos”, les aseguró a los mapuches Bonafini y prometió que con la compañía de la asociación que preside y la de otras organizaciones “vamos a trabajar y vamos a conseguir que este señor Benetton vaya a comprar tierras a su país y que les deje las tierras a  ustedes, que son los dueños de ella”.