Dice el filósofo y militante social Franco Bifo Berardi que lo que sobra en las sociedades presentes es el ruido, y lo que escasea es el silencio para la reflexión.

En efecto, el debate político y social se ha ido reduciendo hasta llegar a lo que Bifo llama contaminación sonora de discursos alienantes, de enunciados monocordes.

Todas las enunciaciones de alcance masivo son variantes del capitalismo.

No se discuten las cuestiones fundamentales acerca de como el sistema lo mercantiliza todo.

De como las vidas se basan en la acumulación en detrimento del goce. Verdadera paradoja la de la ausencia de diálogos genuinos en la era de la telecomunicación.

Es un imperativo el volver a llenar las calles y todos los ámbitos de debates sobre lo importante, el sentido de nuestras vidas y el impulso de acciones colectivas y liberadoras en contra de los simulacros y las imposturas.

Carlos A. Solero