El debate excede las cuestiones de elección sexual. Bryan Cranston salió a defenderse por interpretar a un personaje lisiado en su más reciente película, diciendo que su elección para un cuadripléjico fue “una decisión de negocios”. En The Upside, el protagonista de Breaking Bad interpreta a un billonario en silla de ruedas que contrata como ayudante a un ex criminal, interpretado por Kevin Hart. “Como actores, nos piden que interpretemos a otras personas”, dijo el intérprete estadounidense, quien también señaló que el tema “merece un gran debate” y que “debería haber más oportunidades” para actores discapacitados. Aún así, Cranston sostuvo que está capacitado para encarnar personajes cuyos atributos y habilidades difieren de las suyas. “Soy un actor maduro, hetero, de buen pasar, afortunado. ¿Eso significa que no puedo interpretar a alguien pobre, no puedo hacer un personaje homosexual?”, preguntó. “No sé cuáles son las restricciones, dónde está la línea que lo demarca.”

Jake Gyllenhaal y Dwayne Johnson están entre quienes enfrentan críticas por interpretar personajes discapacitados. Stronger (2017), el film en el que Gyllenhaal encarna a un hombre que perdió las dos piernas en el atentado al maratón de Boston, fue criticado por no elegir a un actor discapacitado. El año pasado, Johnson también fue señalado por pedir que haya más discapacitados en pantalla a la vez que interpretaba a un hombre con una pierna prostética en Rascacielos.

En cuanto a las cuestiones sobre la identidad sexual de los actores que toman personajes queer, Scarlett Johansson, Tilda Swinton, Jack Whitehall y Ed Skrein también afrontaron críticas; algunos incluso se retiraron de proyectos en marcha. Hart, que debió salir a dar explicaciones por sus tuits de 2010 expresando su temor a que su hijo “se volviera gay” –y fue descartado para conducir la ceremonia del Oscar por ello–, cree que todo es una oportunidad para abrir discusiones sobre la diversidad y la inclusión. “Creo que comenzar una conversación siempre es bueno”, dijo.