La noticia fue celebrada en el mundo de la música y en el del cine: la talentosa cineasta argentina Lucrecia Martel fue convocada por la popular cantante y compositora islandesa Björk para dirigir, junto a ella, su próximo concierto multimedia, Cornucopia, que la protagonista de Bailarina en la oscuridad presentará en mayo próximo en Nueva York, en el híper moderno complejo artístico The Shed, que inaugurará en abril. “Me siento muy orgullosa de poder trabajar junto a una de las mujeres más innovadoras del mundo de la música. Colaborar en un show de Björk es un pasaporte al siglo XXII”, definió Martel tras el anuncio. El futuro llegó. Björk, en tanto, publicó ayer en su cuenta de Twitter: “Con gran placer anuncio la incorporación de Lucrecia Martel a nuestro equipo. He admirado su trabajo por mucho tiempo y no puedo creer la bendición de tenerla acá para completar nuestro mundo utópico en The Shed”.

La directora de La ciénaga, La niña santa, La mujer sin cabeza y Zama pasará a ocupar de este modo el rol que originalmente iba a asumir el director de teatro inglés John Tiffany, quien recientemente ganó un premio Tony por el musical Harry Potter and the Cursed Child, basado en el octavo libro de la célebre saga de J.K.Rowling. Tiffany tuvo que bajarse del proyecto por problemas de agenda.

Cornucopia (el término deriva del latín y significa “cuerno de la abundancia”, un símbolo de prosperidad y afluencia) se destaca entre los platos fuertes de la temporada inaugural de The Shed, un nuevo complejo artístico ubicado frente al puerto de Manhattan, tan moderno en su estética y sus escenarios móviles como en la programación que anuncia a partir del 5 de abril. El edificio, a cargo del estudio Diller Scofidio + Renfro, es toda una proeza arquitectónica: tiene la capacidad de ir mutando y transformando sus espacios, de acuerdo a las necesidades de cada puesta o instalación. Las entradas estarán a la venta a partir del 13 de febrero, y que costarán desde 50 dólares. Habrá ocho conciertos, entre el 6 de mayo y el 1° de junio. 

Los shows cruzarán la música en vivo, la tecnología digital y proyecciones visuales, y se desarrollarán en la sala The McCourt. Según informó Alex Poots, director artístico y CEO de The Shed, el espectáculo inaugurará precisamente esa sala de este revolucionario centro artístico signado a convertirse en uno de los faros culturales de Nueva York.

Junto a Martel, en la puesta trabajarán el artista multimedia alemán Tobias Gremmler, la diseñadora holandesa Iris Van Herpen, el artista plástico británico James Merry (habitual colaborador de Björk) y la coreógrafa Margrét Bjarnadóttir. En la serie de conciertos, Björk estará acompañada por el ensamble de flautistas islandeses Viibra, Katie Buckley en arpa, Manu Delago en percusión y Bergur Þórisson en electrónica, además de un despliegue coral. 

Catalogada por el influyente diario estadounidense The New York Times como “una de las miradas más importantes del cine de America latina”, Martel recibió esta propuesta tras el éxito de crítica cosechado por su última película, Zama. Exploración surreal del colonialismo del siglo XVIII, Zama ha sido considerada una de las mejores películas de 2018 por los medios más prestigiosos de Estados Unidos y Europa. En 2017 la directora salteña había comenzado a trabajar en la régie de la ópera Andrea Chénier, un drama de ambiente histórico basado libremente en la vida del poeta francés André Chénier, quien fue ejecutado durante la Revolución Francesa. La puesta iba a ser en el Teatro Colón, pero finalmente Martel debió bajarse de este proyecto por un problema personal. Esta será una segunda oportunidad para desarrollar sus conceptos escénicos en vivo.