La Fiscalía de Santa Fe investiga la muerte de una beba, cuyo cuerpo fue llevado por su madre al hospital Cullen de Santa Fe. La mujer también presentó la placenta. Si bien el embarazo había llegado casi a término, no se registraron controles en el sistema de salud. El director del centro de salud, Juan Pablo Poletti, precisó que la mujer ingresó al Cullen el viernes alrededor de las 4.30 de la madrugada con dos cajas: en una llevaba a su beba y en otra, su placenta. La neonatóloga de turno confirmó la muerte de la beba que pesaba 3 kilos y nació viva. El embarazo había llegado a las 36 semanas pero nunca fue controlado. Por otro lado, se desconocen las condiciones del parto. La mujer, de 27 años, quedó internada, luego de manifestar que la beba se cayó al suelo.