Jorge Ramos, periodista de Univisión, denunció anoche que fue retenido durante dos horas en el Palacio de Miraflores en Venezuela luego de que el presidente Nicolás Maduro se retirara de una entrevista que le estaba concediendo. Además, dijo que le secuestraron sus equipos con el material que había llegado a grabar. “No nos prestamos a shows baratos”, respondieron desde el gobierno venezolano y acusaron a Ramos de “grabar con cámaras escondidas zonas de seguridad” de la Casa de Gobierno.

 

“Tras 17 minutos de entrevista, a él no le gustaron las cosas que le estábamos preguntando sobre la falta de democracia en Venezuela, la tortura, los prisioneros políticos, sobre la crisis humanitaria que estaba viviendo, y se levantó de la entrevista después de que le mostrara el vídeo de unos jóvenes comiendo de un camión de basura”, contó Ramos en un contacto telefónico con Univisión, una cadena estadounidense de noticias en español.

Añadió que tras el final del reportaje, el ministro de Comunicación Jorge Rodríguez les informó que “la entrevista no estaba autorizada”. “Y nos confiscaron todo nuestro equipo”, completó. El equipo de Univisón se dirigía esta mañana rumbo al aeropuerto de Maiquetía para abandonar Venezuela.

Rodríguez cuestionó la versión del periodista mexicano y aseguró que Ramos “no vino a hacer una entrevista”. “Vino a insultar y a grabar con cámaras escondidas zonas de seguridad del palacio. Dimos por terminada la entrevista y ya se fueron al hotel”, dijo el funcionario al diario El País de España.

“Por Miraflores han pasado centenas de periodistas que han recibido el trato decente que de forma habitual impartimos a quienes vienen a cumplir con el trabajo periodístico, y han publicado el resultado de ese trabajo. No nos prestamos a shows baratos”, completó Rodríguez vía Twitter.

 "En el mismo momento en que @ABC publica una entrevista con el Presidente @NicolasMaduro, el Departamento de Estado (de EE.UU.) inventa un nuevo falso positivo con un show y un montaje", añadió el funcionario venezolano.