La Nasa informó que un meteorito de grandes dimensiones penetró en diciembre la atmósfera de la Tierra hasta causar una explosión diez veces más poderosa que la bomba atómica lanzada sobre Hiroshima (Japón) en 1945. El estallido, que fue detectado por los satélites militares de EE.UU., sucedió sobre el mar de Bering, frente a la península de Kamchatka, una zona remota de Rusia.

Según la NASA, esta explosión fue la segunda más fuerte de su tipo en los últimos 30 años y es el meteorito más grande en llegar a la atmósfera de la Tierra desde el que impactó en Cheliábinsk (Rusia) en 2013. 

El asteroide que impactó sobre el mar de Bering en diciembre recorrió la atmósfera a una velocidad de 32 kilómetros por segundo, siguiendo una trayectoria de siete grados. La bola de fuego viajó a través de un área “no muy lejana” de las rutas utilizadas por los aviones comerciales que vuelan entre América del Norte y Asia. El meteorito explotó a unos 25, 6 kilómetros sobre la superficie de la Tierra, con una energía de impacto de 173 kilotones, de acuerdo a los datos de la agencia espacial. 

Lindley Johnson, encargado de defensa planetaria de la NASA, explicó que una explosión tan grande solo tiene lugar unas dos o tres veces cada 100 años. 

En 2005, el Congreso le pidió a la NASA que identificara para 2020 el 90% de los asteroides cercanos a la Tierra de un tamaño de 140 metros o más. Las rocas espaciales de este tamaño han sido bautizadas "problemas sin pasaportes", porque se espera que afecten regiones enteras si llegan a colisionar con la Tierra.