“Me sentí conmovido en aquella ciudad hermosa, lunática e indescifrable”, escribió Gabriel García Márquez en un artículo que publicó en enero de 1982. La ciudad hermosa es Barcelona y a menos de un mes para el comienzo de la 45° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, la ciudad invitada de honor desembarcará en el predio de La Rural con una programación que incluirá diálogos entre escritores, homenajes, muestras fotográficas, música, poesía, cine y teatro, en un stand de 200 metros cuadrados, con auditorio y librería, ubicado en el Pabellón Amarillo. De los 75 invitados, 56 son autores e ilustradores, hay 8 especialistas del mundo de la literatura y 14 artistas, entre los que se destacan los escritores Carlos Zanón, la filósofa Marina Garcés, Paula Bonet, Eva Baltasar, Maite Carranza, Najat El Hachmi, Alejandro Palomas, Joseph Pedrals, Javier Pérez Andújar, Xavi Ayén, Jordi Sierra i Fabra y Llucia Ramis, entre otros, además de los escritores argentinos que  hace tiempo viven en la capital de Cataluña, como el historietista Horacio Altuna, la crítica y ensayista Nora Catelli, la escritora Flavia Company y el crítico y poeta Edgardo Dobry. Quizá la actividad más destacada, la que convocará a miles de fans de Merlí, será la presentación de Héctor Lozano y Carlos Cuevas, creador y uno de los actores de la serie, el martes 30 de abril, a las 20, en la sala Tulio Halperin Donghi, un espacio un tanto pequeño para la magnitud de este encuentro.

Bajo el lema “Barcelona Ciudad Literaria”, las actividades intentarán reproducir algo del espíritu que genera el “Sant Jordi”, el Día del Libro, que se celebra el 23 de abril, una gran fiesta ciudadana en la calle, única en el mundo, en la que se venden más de un millón de libros y tres millones de rosas. El concierto gratuito de Sílvia Pérez Cruz, pensado alrededor de la relación entre música y poesía, un vínculo que la artista catalana viene explorando hace años al haber musicalizado poemas de Maria-Mercè Marçal, Anna María Moix, Feliu Formosa, Maria Cabrera, Federico García Lorca y Miguel Hernández, también está entre las actividades que mayores expectativas está generando (sábado 27, a las 20). Habrá un homenaje al editor Claudio López Lamadrid, que murió el pasado 10 de enero, paradigma de la tradición editorial de Barcelona, que empezó su trayectoria en la editorial Tusquets de Beatriz de Moura y su tío “Toni” López, y que culminó al frente de la edición literaria de Penguin Random House. Lo recordarán Juan Ignacio Boido, Paula Bonet y Maitena (viernes 26, a las 17, en el stand de Barcelona). La ciudad invitada desplegará también actividades por fuera de la Feria, como Barcelona-Buenos Aires. Un puente de libros, una muestra en el Museo Larreta que repasará las intensas relaciones entre editores y libreros de las dos ciudades a lo largo del siglo XX.

La cláusula Balcells, de Pau Subirós, es un documental sobre Carmen Balcells, la agente literaria que cambió las relaciones de poder en la literatura y pieza clave en el llamado boom latinoamericano. Su agencia en Barcelona se convirtió en la más importante del mundo hispanohablante y en una de las más grandes del mundo (sábado 27 de abril, a las 14, en el stand de Barcelona). El periodista Xavi Ayén presentará su libro Aquellos años del boom, que retrata la conjunción literaria producida en la capital catalana en 1967, encabezada por dos Premio Nobel, García Márquez y Mario Vargas Llosa. Ellos y un grupo de nuevos autores situaron la lengua española en una dimensión desconocida hasta aquel momento, donde el canon dejaba de ser occidental y los ojos del mundo pasaban a mirar la creciente literatura de Latinoamérica (9 de mayo, a las 20, stand de Barcelona). 

La escritora y periodista Llucia Ramis (Palma de Mallorca, 1977) presentará en la Feria su última novela Las posesiones (Libros del Asteroide). Ramis vivió en Buenos Aires en 2012, entre abril y julio. “Me encantó la ciudad y tenía muchas ganas de vivir allí, pero tuve que volver a España por motivos personales y encontré trabajo aquí como periodista”, recuerda la autora desde Barcelona. “Soy periodista y llevo casi quince años cubriendo tres o cuatro presentaciones de libros semanales. Yo hago la crónica que sale cada sábado en La Vanguardia –cuenta Ramis a PáginaI12–. Barcelona es una ciudad literaria sobre todo por el Sant Jordi, el Día del Libro, que es una gran fiesta. Los libreros sacan tenderetes a las calles con todos los libros; todo el mundo compra libros y regala libros; el 40 por ciento de la industria editorial española se la juega ese mismo día. Pero también es una ciudad literaria por la tradición del boom, por García Márquez y Vargas Llosa, como lo ha escrito Xavi Ayén en Aquellos años del boom, que es un librazo. Existe mucho movimiento literario que frecuento por el trabajo maravilloso que tengo”, agrega Ramis. La lunática Barcelona promete el “pan” de muchos lectores: libros y rosas.