El grupo islamista radical Estado Islámico (EI) reivindicó ayer la serie de atentados perpetrados en Sri Lanka contra iglesias y hoteles de lujo que causaron la muerte de más de 321 personas el pasado domingo de Pascuas. Además desde el gobierno aseguraron que los ataques se produjeron en represalia por la masacre en dos mezquitas de Nueva Zelanda, el 15 de marzo.

“Los autores de los ataques contra los ciudadanos de los países de la Coalición (anti-EI) y los cristianos en Sri Lanka de anteayer son combatientes del EI”, anunció el grupo jihadista a través de su agencia de noticias Amaq. Si bien la autenticidad del mensaje aún no pudo ser verificada, las autoridades de Sri Lanka apuntan desde el lunes a un grupo islamita radical local con posibles conexiones internacionales, conocido como National Thowheeth Jamath (NTJ). En el mensaje, que también se trasmitió vía la red de mensajería Telegram, el grupo radical asegura que fueron siete los terroristas involucrados en el atentado. Además agrega que sus hombres atacaron varias iglesias y hoteles donde se encontraban seguidores de la coalición internacional, encabezada por Estados Unidos e integrada por 75 naciones. En los ataques, continúa, emplearon cinturones, chalecos explosivos y bombas. 

El mismo domingo los atentados dejaron un saldo de 207 muertos. Sin embargo los últimos datos de ayer aseguran que el número de muertos subió a 321 y el de heridos de distinta gravedad llegó hasta 500. Además ayer se hicieron  tres minutos de silencio en todo el país a las 8.30, la hora exacta de la primera explosión en la iglesia católica San Antonio de Colombo. Luego tuvieron lugar los funerales. En la iglesia de San Sebastián, donde todavía se ven las marcas de la explosión con estatuas y bancos totalmente destruidos, asistieron más de mil personas.    

Desde el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informaron que entre las víctimas fatales hay 45 niños y un número similar de menores con heridas graves. El dato fue confirmado en Ginebra el portavoz del organismo, Christophe Boulierac. En relación a las víctimas extranjeras hay al menos 31 muertos. Entre ellos, dos españoles, un bangladesí, dos chinos, ocho indios, un francés, un japonés, un holandés, un portugués, dos saudíes, dos turcos, seis británicos, dos angloestadounidenses y dos australianos, según informaron autoridades locales.     

Ya con dos días de investigaciones, ayer empezaron a circular los primeros resultados que apuntan principalmente a que las explosiones fueron en represalia por la reciente masacre en dos mezquitas de Nueva Zelanda, donde un supremacista blanco mató a 50 personas.