Desde Santa Fe

El debate entre los tres candidatos a gobernador de Santa Fe, que fue televisado en vivo por los canales de aire de la provincia y diferentes plataformas y emisoras tuvo algunos momentos de tensión, pero no emergió un claro ganador. Probablemente la convicción tanto de Omar Perotti, candidato del peronismo, y Antonio Bonfatti, del socialismo, de ir al frente en la intención de voto los hizo preocuparse más de no cometer errores antes que “ir a buscar el partido”, como si lo intentó José Corral, el candidato de Cambiemos, quien fue el más estentóreo en sus presentaciones. Sin embargo, el “mano a mano” era evidente, ya que los dos favoritos para los comicios del domingo se cruzaron en un par de temas, ignorando las palabras de Corral que prometió eliminación de impuestos, baja de tarifas y otros escenarios contradictorios con la “vida real” desde que Mauricio Macri es Presidente. 

Dividido en “ejes temáticos”, el debate abarcó Seguridad y Justicia en primer lugar, Economía y Producción, Salud/Políticas sociales, luego Educación y finalmente el amplio y pretensioso “Santa Fe 2030”, que dio rienda suelta a la imaginación de los candidatos. 

El primer escarceo fue apenas comenzado el debate en torno a “seguridad y justicia”, un tema del que podían esperase momentos de mayor tensión,que nunca llegaron. Apenas Corral –que sacó de su atril un par de esposas– intentó calentar el ambiente acusando al candidato socialista de haber gobernado la provincia en el lapso de mayor crecimiento de la delincuencia y la criminalidad. A tono con el credo del PRO, Corral destacó la gestión de Patricia Bullrich, habló de “la puerta giratoria” y como “la seguridad se le fue de las manos al socialismo”. Remató criticando “el kirchnerismo y las doctrinas de Eugenio Zaffaroni”. 

A su turno, Perotti dijo que “los santafesinos van a estar seguros de qué lado está el gobernador” y aseguró que va a “conducir la policía y desarticular las complicidades”. “No puede ser que a dónde vamos, los vecinos saben donde están los bunkers, los delincuentes y el Estado no”, para concluir en que “dejemos de apuntarnos entre nosotros y volvamos a hacer lo que es necesario, recuperar la presencia del Estado en territorio, los clubes, la vecinales, las parroquias”. Finalmente, Bonfatti recogió el guante: “no voy a contestar falsedades”, dijo y sostuvo que “en Santa Fe, el que las hace las paga”. Enumeró las bandas criminales que fueron desarticuladas “a partir del trabajo de la Justicia y del Ministerio de Seguridad, que cuenta con el segundo mayor presupuestó de la provincia”.     

El tramo siguiente se enfocó en la economía, y allí Perotti destacó la “pérdida de 3700 pymes” y criticó el modelo económico de Cambiemos, a lo que agregó la falta de respuestas del gobierno de Santa Fe en cuanto a la necesidad de generar empleos y bajar la sobrecarga sobre el sector público. Lo más destacado fue anunció del congelamiento de tarifas y las reducción del gasto público. 

Corral –con la comodidad que le permite el tercer puesto en todas la encuestas– fue más allá y prometió bajarlas, lo mismo con los impuestos e inclusive la eliminación de Ingresos Brutos, y suprimir la mitad del “gasto político”.

Bonfatti evitó la polémica y sostuvo que “Santa Fe es la provincia menos endeudada de la Argentina y la de menor presión tributaria”, para luego enumerar las obras publicas con recursos propios, especialmente en efectores médicos, e infraestructura.

Con el correr del debate los “ejes temáticos” se fueron fundiendo y a la hora de hablar de educación, la cuestión económica volvió a aparecer. Fue allí cuando el rol de Estado dejó en evidencia la estrategia de los candidatos. Corral se enfocó en la mejora de la calidad docente, las evaluaciones sobre matemática y lengua, y la necesidad de “garantizar los 180 días de clases”. Bonfatti dio cifras de la presencia del Estado: “tenemos paritarias, abrimos 766 jardines para niños de 4 años, mientras en la nación cayó la matricula secundaria un 5 por ciento, en Santa Fe creció el 14, y bajamos la deserción del 12 al 6”. Perotti, a su turno, hizo hincapié en la necesidad de “apoyar desde el Estado la educación y la ciencia, con tarifas diferenciales para los institutos de investigación, la formulación de programa y la capacitación de científicos”, en torno a la enseñanza pública destacó que “vamos a hablar con los intendentes para que en cada pueblo de la provincia ellos se ocupen de asegurar que ningún niño en edad escolar no vaya a clases”, remató el rafaelino. 

El bloque final anunciado como “Santa Fe 2030” permitió un ejercicio de imaginación que también marcó diferencias. Corral arrancó con la necesidad de estar preparados para “el cambio climático”, que requiere obras hídricas para prevenir crecidas e inundaciones, “para que no haya más reparto de frazadas y colchones”.

Perotti prefirió hacer eje en la “necesidad de definir la inversión y recursos”. Anticipó que invertirán “en primera infancia, alimentación, recursos humanos, en la incorporación de valor agregado, el cuidado del medio ambiente”. Bonfatti planteo que “el desafío del fututo es crear trabajo, y para eso vamos a destinar 5 mil millones por año para subsidiar tasas, promover proyectos, apuntalar emprendedores, la economía social, la producción orgánica, las cooperativas de trabajo”, concluyó el candidato que volver a la Casa Gris que ya ocupó entre 2011/2015.

De acuerdo al esquema pautado entre los organizadores, el cierre de dos minutos para cada candidato tampoco provocó sobresaltos. Apenas unos reproches entre el trío. Los conductores del programa sostuvieron que el hashtag “#SantaFeDebate” fue trending topic a nivel nacional. Tan llamativo como eso fue que recién en los últimos 30 segundos de la transmisión apareció el nombre de “Cristina” y solo al pasar en boca del candidato de Cambiemos, que a lo largo de las dos horas precedentes se ocupó de no mencionar ni una vez a Mauricio Macri, cosa que tampoco hicieron Perotti y Bonfatti, que se saludaron cordialmente al bajar de sus tarimas.