Entrevista Maximiliano Montenegro

“La reelección no afecta a la economía”, dijo el secretario de Hacienda, Pablo Guidotti, en una entrevista concedida a Cash. El viernes por la tarde, Guidotti, quien reemplazará a Carlos Rodríguez en el cargo de viceministro de Economía, estaba distendido. Y no dudó en tomar distancia del polémico Rodríguez, quien se preguntó poco antes de renunciar si valía la pena sostener la reelección presidencial a la luz de los costos que podía implicar para la economía la violenta interna del PJ. Guidotti, en cambio, quiso dejar en claro que “Menem es el garante del modelo” y, sobre la interna en el oficialismo, afirmó: “Hoy en día lo que pasa con la política está al margen de la economía”. El flamante número dos de Economía también buscó acercar posiciones con el ala política en el Congreso. Dijo que los diputados del oficialismo se comprometieron a trabajar en los próximos quince días para aprobar la generalización del IVA, cuya exclusión del paquete tributario en el Congreso detonó la salida de Rodríguez el miércoles pasado. En tanto, demostró un gran espíritu democrático: “Las decisiones importantes necesitan la interacción de las instituciones. La visión de que las cosas las decide un ministro y otro día salen es totalitaria”, afirmó.

-¿Qué cambia de aquí en más con Carlos Rodríguez fuera del equipo económico?
-No cambia absolutamente nada. La presencia de Carlos era importante, yo en particular trabajaba mucho junto con él y tenemos exactamente la misma forma de ver la economía. Roque, Carlos y yo tenemos la misma visión ideológica.

-¿No le parece que Roque Fernández quedó debilitado?
-No. Hay que mirar la realidad. La economía argentina sigue creciendo fuerte. Seguimos luchando por las reformas que creemos son importantes. Y tenemos un respaldo total del Presidente para avanzar con esas reformas.

Esto, independientemente de que todos vamos a extrañar la presencia de Carlos.
-Algunos consultores, como Broda, dicen que Carlos Rodríguez hizo lo que hubiera querido hacer Cavallo, y no pudo, cuando Menem empezó a jugar su primera reelección a fines del ’94 y empezó a prevalecer el ala política sobre la económica.

¿Usted no teme que en el futuro se lo acuse de no ser consecuente con sus ideales?
-Hoy en día, todas las decisiones importantes necesitan la interacción de las instituciones. Esto es así también en Estados Unidos. La visión de que las cosas las decide un ministro y otro día salen es totalitaria. Hay muchos que todavía tienen la mentalidad totalitaria del pasado, que piensan que tiene que haber un mago, un ministro iluminado, que debe imponer sus decisiones. En la función pública uno se debate permanentemente entre lo óptimo y la realidad, a partir de la interacción de las instituciones. A veces salen mejor, otras peor, pero lo importante es que en conjunto las políticas vayan en la dirección correcta.

-¿Para usted sería una causal de renuncia que haya un retroceso en las privatizaciones o en la apertura comercial, por ejemplo?
-Nosotros no somos políticos. Estamos acá para aportar conocimientos técnicos. Yo viví diez años en el exterior. Volví en el ’92 porque pensé que esta política estaba cambiando al país. Argentina vivía aislada y esta política la integró al mundo. En la medida en que podamos seguir aportando para que este proceso continúe lo vamos a hacer.

-¿Las opiniones polémicas para el ala política que dejaba transcender más de una vez Carlos Rodríguez sobre algunos temas, como por ejemplo la reforma laboral de Erman González, el Ministerio de Economía las va a seguir haciendo públicas?
-Con esta reforma laboral, hay algunos aspectos en los que se avanza y en otros no se avanza. Nos preocupa que la eliminación de los contratos promovidos sin una rebaja de los impuestos al trabajo, que se debería hacer con la reforma tributaria, tenga un impacto negativo importante sobre el empleo. Los contratos promovidos suponen un tratamiento impositivo diferente entre un contrato de corto plazo (sin impuestos) y uno de largo plazo. En la medida en que podamos bajar los impuestos al trabajo, esta diferencia por el plazo de los contratos debería ir perdiendo importancia. Pero la realidad es que estos contratos generaron muchos empleos. Y si se eliminan sin que bajen los impuestos al trabajo, tenemos la preocupación de que afecte negativamente al empleo.

-Pareciera que hay que olvidarse de la baja de los aportes patronales, tal como se está dando la discusión de la reforma impositiva...
-Lo que me ha trasmitido (Oscar) Lamberto (titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda) es que Diputados emitió un dictamen parcial (sobre la reforma) que incluía aspectos en los que estaban de acuerdo. Todavía no habían logrado acuerdo sobre la generalización del IVA, que nosotros vemos como un tema crucial porque sólo así se podría bajar los impuestos al trabajo. Ellos se comprometieron a trabajar en los próximos 15 días para lograr el consenso necesario para incluir la generalización del IVA en el proyecto. En la medida en que avancemos en esa dirección el trabajo que se está realizando con la reforma impositiva es muy productivo. Si no se hace la generalización del IVA, ya dijimos que preferimos retirar el proyecto.

-¿Usted cree que Menem va a insistir con el apoyo que manifestó el jueves a la reforma que ustedes quieren?
-Menem tiene exactamente la misma visión que nosotros.

-¿Le preocupa que el proceso político actual, con la fuerte interna entre Menem y Duhalde, pueda afectar la economía?
-(Piensa algunos segundos.) ...Hay que reconocer que Argentina está en un proceso preelectoral muy importante para el año que viene. Y que los eventos políticos como una elección presidencial son tomados en cuenta por los operadores económicos. Pero Argentina ha logrado un grado de madurez tal en sus instituciones que la economía no refleja lo que está pasando en la política. Esta situación habla de la buena imagen de Argentina ante los mercados. De todos modos, la política es importante para la economía y en un contexto internacional muy volátil tenemos que dar señales de que seguimos avanzando con las reformas.

-Concretamente, ¿la discusión sobre la reelección está afectando la economía?
-No.

-¿Y puede llegar a afectarla?
-Todavía estamos lejos de la elección presidencial y los mercados lo reconocen. A pesar de que hay un proceso de ebullición política tanto en la oposición como en el oficialismo, la realidad es que estamos lejos de la elección presidencial y los mercados no están enfocados en el tema.
Hoy los operadores sólo ven los números de la economía, que andan bien.

-Dentro del establishment hay quienes creen que Menem es “el garante” del modelo. Otros, en cambio, evalúan que el costo de jugar otra reelección es demasiado alto, dada la interna abierta en el propio justicialismo. ¿Usted cree que es bueno o malo para la economía que Menem quiera competir por un tercer mandato?
-Desde el punto de vista económico, interesan los hechos. Los mercados miran a las personas y a las políticas que ellos inspiran. Por eso, no están para nada preocupados con el tema de la reelección. Identifican a Menem con una política económica que les inspira confianza. Acá nadie duda de que las instituciones argentinas se están fortaleciendo a lo largo de los años. Nadie está pensando que alguna de las decisiones que se tome vaya a violar las instituciones.

-¿Un plebiscito o un dictamen de la Corte Suprema que lo habilite a Menem para un tercer mandato no viola la Constitución?
-Cualquier decisión que se adopte (para habilitar la reelección), se reforme o no la Constitución, no afecta a las instituciones sino que surge del propio sistema institucional. Los mercados van a esperar a que se defina la situación política y a que de todo este proceso se destilen candidatos. Una vez que se definan van a escuchar qué tienen para decir entérminos de propuestas. En ese momento recién la política va a ser tomada en cuenta por los operadores económicos. Hoy en día lo que pasa con la política está al margen de la economía. Estamos muy lejos de las elecciones.

-Pero Carlos Rodríguez dijo: “Pareciera que las elecciones fueran mañana”.
-Esa fue una lectura personal sobre la intensidad del debate político. Pero para la economía lo que importa son las políticas que se siguen hoy: miran temas como la reforma tributaria o el déficit fiscal. Y en todas estas cuestiones Argentina está yendo bien.

-En algún momento conversaron con Roque Fernández la posibilidad de permanecer en el equipo económico después del ’99.
-Aunque salga la reelección presidencial, estamos convencidos de que no vamos a seguir después del ’99. No tenemos voluntad para eso.

-¿Por qué están tan convencidos?
-Porque hay proyectos de vida (se ríe)... que no están ligados a la función pública.