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Como en los viejos tiempos, Erman González salió a ponerles el pecho a todos juntos: Duhalde, el FMI, Roque Fernández. “El modelo no está agotado”, aseguró. Y dijo que Duhalde puede anunciar aumentos de salarios en Buenos Aires porque tiene “el Fondo del Conurbano que le permite contar con recursos de libre disponibilidad”. “La provincia de Buenos Aires es una isla en el país. Si todas las provincias tienen que manejarse con recursos escasos y una coparticipación pactada, mientras Buenos Aires tiene un adicional (el Fondo del Conurbano), está claro que su situación es distinta”, explicó. En tanto, afirmó que si Duhalde llegara al gobierno nacional tendría que seguir los lineamientos de la política de Menem.

erman gonzález



Por Maximiliano Montenegro

Sobre el FMI, Erman cree que cedió respecto de la reforma laboral: "No será al revés, ¿quién terminó cediendo?, desafía cuando se le dice si al final de cuentas no estuvo permisivo con el Fondo Monetario que —en su opinión— sólo planteó cambiar "dos cosas menores". Además, confesó que tiene más coincidencias filosóficas con la CGT que con el FMI.

A Roque Fernández le envió un tiro por elevación al decir que a la hora del ajuste fiscal "la solución no la podemos encontrar siempre en bajar el gasto. Yo apostaría mucho más a aumentar los ingresos. Y criticó el pobre accionar de la DGI. Roque había dicho unos meses atrás en Washington que tenía más coincidencias filosóficas con el FMI que con la CGT, pero aclaró: "Los muchachos de la CGT son más divertidos".

—¿Qué disfruta más, las reuniones con el FMI o con la CGT?

—Son de distinta naturaleza. En ambos casos, mi misión es llamar a la razonabilidad.

—Es decir que no disfruta las reuniones con ninguno de los dos.

—Solamente cuando no hablamos de trabajo y contamos anécdotas.

—¿Y quiénes son más divertidos: los muchachos de la CGT o los técnicos del Fondo?

—Sin duda, la gente de la CGT es más divertida que Teresa Ter Minassian. Tienen un anecdotario muy rico.

—¿Con quién se siente filosóficamente más cercano, con la CGT o con el FMI?

—Con la CGT, no tengo dudas. Pero filosóficamente. Esto no quiere decir que no tenga que ocupar mi rol cuando los planteos van más allá de lo que consideramos razonable.

—¿El modelo está agotado?

—Absolutamente no.

—¿Por qué?

—Porque yo no soy de los que creen que exista un modelo. Eso significaría que existe un recetario fijo para una comunidad estática. Con la dinámica con que se mueven las sociedades, en el marco de la globalización, no pueden existir estas recetas. Es obligación permanente del Estado ir adecuándose a las nuevas realidades.

—¿No cree que hoy el Estado está ausente en muchos sectores?

—Soy de los que creen que en esta área en particular (el mercado de trabajo) sí se han aflojado muchos controles. A partir de la concesión de creer que el mercado lo resuelve todo. Y de la delegación de la facultad de policía del trabajo de la Nación en las provincias se han ido aflojando todos los controles e inspecciones en las empresas. Esto es lo que estamos tratando de corregir a través del Consejo Federal de Administraciones del Trabajo, para brindar capacitación y equipamiento a las provincias para poder mejorar las inspecciones.

—Ministro, cuando Roque Fernández dice que hay que profundizar el modelo la gente entiende lo que está diciendo. ¿Usted está de acuerdo con que de esta manera se solucionan los problemas sociales?

—Nos tenemos que poner de acuerdo sobre qué es el modelo...

—Roque y los economistas de la city están diciendo: es necesario recortar gasto público, para consolidar la situación fiscal, dar más credibilidad a los mercados, lo que va a redundar en más crecimiento y bajas del desempleo. ¿Usted está de acuerdo con esa idea?

—No. Creo en la necesidad del equilibrio fiscal. Pero se logra por dos términos: los recursos y los gastos. Si estamos hablando de una evasión del orden del 40 por ciento, la solución no la podemos encontrar siempre en bajar el gasto. Yo apostaría mucho más a aumentar los ingresos. Si estamos hablando de 3.300.000 trabajadores en negro, representan una evasión previsional de 10 mil millones de pesos. Necesitamos fortalecer los mecanismos de control, y no sólo en la parte laboral sino también fiscales.

—Está hablando de que tiene que mejorar la Administración Federal de Ingresos Públicos, la DGI...

—Tienen que mejorar los mecanismos de recaudación. La DGI tendrá sus problemas. Se dice que la ley penal tributaria no se aplica fuertemente, que a lo mejor no tiene los recursos necesario para hacerlo. El compromiso es de todos. Se está recaudando mucho menos de lo que se debiera.

—¿Los empresarios tienen una cuota importante de responsabilidad en la evasión?

—Hay un conjunto de factores. La estructura de los impuestos al trabajo. La burocracia que se les impone para el cumplimiento de sus obligaciones. Y también, a veces, el ánimo de buscar competitividad a través de la evasión fiscal y laboral.

—Su ministerio va a recortar este año 227 millones de pesos dentro del ajuste de mil millones dispuesto por Roque Fernández. ¿No le parece un poco drástico recortar fondos en un área tan sensible como trabajo sólo para dar una señal a los mercados?

—Durante los primeros seis meses del año ya hicimos un congelamiento de programas que nos da alrededor de 180 millones de pesos. Entonces, de julio a diciembre del ‘98 lo único que vamos a hacer es no utilizar lo que ya habíamos congelado. Vamos sí a recortar gastos de administración y congelar vacantes, aunque son necesarias para tareas de supervisión, como decía anteriormente. Pero no tocaremos jubilaciones, pensiones y el financiamiento de programas como el Trabajar, cofinanciado con el FMI.

—¿Qué opina de lo que está haciendo Duhalde en la provincia de Buenos Aires: aumenta salarios y obra pública con créditos externos y la privatización de la empresa de energía provincial?

—Si él está cubriendo la necesidad de puestos de trabajo y de infraestructura escolar a través de la obra pública será porque tendrá establecidas esas prioridades. En el orden nacional, hay una clara definición de un camino: que cada obra de infraestructura se licite con su propio financiamiento y no con la forma tradicional, aumentar el gasto público.

—¿Si usted vendiera el 20 por ciento de acciones de YPF en manos del Estado y el resto de empresas residuales, con ese dinero haría obra pública y salariazo o cancelar deuda como quieren Roque Fernández y el FMI?

—Hay que analizar en qué coyuntura nos encontramos. Hoy las bolsas del mundo amenazan la estabilidad en los países emergentes como el nuestro. Entonces, hay momentos en que es mejor postergar la inversión, asegurando la solidez financiera, para evitar males mayores que podrían significar una fuga de capitales.

—Entonces, con esos fondos preferiría cancelar deuda a hacer obras y salariazo.

—En este momento, es lo más recomendable. A lo mejor, si me pregunta dentro de dos meses, y la situación se ha normalizado, por ahí le digo que lo prioritario es lo otro.

—No cree que los mercados son demasiado ingratos con el gobierno de Menem al seguir pidiéndole más ajuste. ¿No le hubiese gustado poder gastar más en salarios y obra pública como hace Duhalde?

—Claro que sí. Pero la distancia entre lo que uno se imagina como el ideal y lo que se puede llegar a hacer en la realidad es grande, sobre todo en un contexto en que no todo depende de nuestras decisiones. Siempre hay sueños y expectativas que uno no termina de cumplir porque no dependen de uno. Esto de la globalización tiene sus ventajas pero también trae costos. Ahora, si nos apartamos de la globalización nos iría peor.

—¿Lo hubiera gustado poder decir en el último año, "aquí está el salariazo" y aumentar 15 por ciento los salarios de empleados públicos?

—¿No le parece que el salariazo se dio desde el ‘89 a la fecha?

—Nunca lo escuché a Menem anunciar aumento de salarios a los empleados públicos como sí lo hizo Duhalde este año.

—No me haga esas comparaciones. Porque Duhalde tiene otras posibilidades. No nos olvidemos de que tiene el Fondo del Conurbano que le permite contar con recursos de libre disponibilidad. La provincia de Buenos Aires es una isla en el país, se maneja de una manera distinta. Si todas las provincias tienen que manejarse con recursos escasos y una coparticipación pactada, mientras Buenos Aires tiene un adicional (el Fondo del Conurbano), está claro que su situación es distinta.


Evasión:
“Con una evasión del orden del 40%, la solución no la podemos encontrar siempre en bajar el gasto. Yo apostaría mucho más a aumentar los ingresos.”


Para Duhalde:

  • “El modelo no está agotado”
  • “La provincia de Buenos Aires es una isla en el país porque tiene el Fondo delConurbano”
  • “El salariazo Menem lo dio desde 1989”.

    Para el FMI:

  • “Tengo más coincidencias filosóficas con la CGT que con el FMI”
  • “Los muchachos de la CGT son más divertidos que Teresa Ter Minassian”

    Para Roque Fernández:

  • “Se está recaudando mucho menos de lo que se debiera”.

    Para la Alianza:

  • “No temo a que me investigue la Alianza”


    Competitividad:
    “Los empresarios, a veces, con el ánimo de buscar competitividad (en su actividad) lo hacen a través de la evasión fiscal y laboral.”


  • Menem, Perón y el poder después del ‘99

    -¿Usted que siempre estuvo junto a Menem y lo vio siempre ganar elección tras elección, cómo lo vio frente a su primera gran derrota al tener que desistir de la reelección?
    -No lo vi como una derrota. Dio un paso adelante en su dimensión como estadista al privilegiar la unidad nacional.
    -¿No cree que llegó hasta el extremo hasta que se vio cercado por el plebiscito de Duhalde?
    -No fue él quien ha motorizado todo esto. Yo sigo pensando que el mejor candidato del justicialismo es Carlos Menem, pero no motorizó actos públicos y procedimientos ante la Justicia. Pero aun concediendo que él haya permitido que se hagan todos esos actos, llegó un momento en que decidió dar el paso al costado.
    -¿Cómo se lo imagina a Menem fuera del poder, o se lo imagina siempre con poder?
    -Me lo imagino con una fuerte incidencia en la política argentina. Como jefe del partido, si el partido gana o no las elecciones, va a tener una real trascendencia en la vida pública. Perón, aun estando 17 años en el exilio, tuvo una influencia decisiva en la vida pública argentina.
    -Después de Menem, ¿cuál es el mejor candidato del PJ?
    -No lo tengo identificado.
    -¿Usted no está en carrera?
    -¿Por qué me está sacando de carrera?
    -Lo tiene que decir usted.
    -Yo espero que lo diga otra gente.
    -¿En carrera para qué?
    -Donde la gente me vea mejor.
    -¿Le interesa una candidatura a senador?
    -Eso es falso, de la manera en que se está planteando. Primero, que estoy buscando inmunidad, lo que nunca jamás he buscado y tampoco utilizaría. Además, el tema de la senaduría por capital está en manos del propio partido, para lo cual no estoy en carrera.
    -¿No teme quedarse sin poder y quedar a merced de las investigaciones de la Alianza?
    -Absolutamente no.

    La negociación con el FMI para cambiar la reforma laboral
    “¿Quién terminó cediendo, el FMI o yo?”

    -¿Al final de tanta discusión por la reforma laboral, usted terminó cediendo al reclamo del FMI y los empresarios al extender el período de prueba a seis meses?
    -¿No será al revés? ¿Quién terminó cediendo? -Dígamelo usted.
    -Usted recuerda la cantidad de titulares que decían que la reforma es retrógrada, es mala, es la no reforma, el Fondo Monetario y los empresarios la rechazan totalmente, para después de todo terminar en dos inquietudes que mi compromiso es transmitir a los integrantes de la comisión de legislación de Diputados si las aceptan o no. Y las acompaño porque no cambia la esencia de la cuestión.
    -¿El período de prueba no termina jugando el rol de un contrato promovido?
    -No es así. El período de prueba en el proyecto de reforma proponíamos reducirlo de 90 a 30 días. Pero por convención colectiva se podía extender hasta 180 días. Actualmente hay convenciones colectivas, firmadas por empresa, especialmente en el sector automotor, en las que se puede considerar hasta un año período de prueba. Nosotros esto lo eliminamos. Además, en los 180 días que sugiere el Fondo Monetario el empleador tendría la obligación del pago de aportes previsionales, sólo se exime del pago de la indemnización. Con respecto a la ultraactividad, la sugerencia es a la inversa de lo que planteaban antes: nosotros planteamos siempre la ultraactividad y ahora nos están diciendo que la extendamos a los convenios de empresa. De todas las objeciones que tenían antes sólo quedaron estas dos cosas menores.
    ¿Usted convenció al FMI y a los empresarios?
    -No lo tomo como un partido de fútbol. Pero ha triunfado la razonabilidad y la equidad. Esta no es una reforma ideal o el traje a medida para cada uno de los sectores. Con esta vamos a lograr dos objetivos: por un lado, una mayor competitividad para la producción; y por el otro, el respeto al hombre, a través de una negociación colectiva que surge de paritarias.
    -¿En qué nivel puede estar la desocupación a fines del ‘99?
    -Si se dan una serie de condiciones, continúa el ritmo de crecimiento del PBI, el ritmo de las inversiones, aumentamos las exportaciones en cantidad y valor, más la modernización laboral, apostaría que vamos a tener un dígito de desocupación. Pero yo no puedo prever si la crisis del sudeste asiático sigue golpeando o si la economía de Japón o de Rusia puede tener efectos negativos en Argentina y la región.
    -¿Entonces la predicción de Menem de que la desocupación va a estar en el 6 o 7 por ciento al final de su mandato es demasiado audaz?
    -Tiene asidero. Pero dentro de las condiciones que podemos manejar, si no se nos complican los factores exógenos.
    -Ahora, no me diga que si a fines del ‘99 se llega a bajar el desempleo al 6 o 7 por ciento no se sentiría con derecho a que, como ministro de Trabajo, le hicieran una estatua en la Plaza de Mayo...
    -Como ministro de Trabajo del Mercosur... (se ríe).
    -¿No se siente responsable de que la instrumentación de las ART (aseguradoras del trabajo) sin controles efectivos por parte del Estado haya aumentado los accidentes de trabajo?
    -No voy a eludir responsabilidades con lo que le voy a decir, pero el sistema se creó antes de que yo fuera ministro, yo hace sólo seis meses que estoy al frente del Ministerio. Los accidentes de trabajo, durante estos seis meses, no aumentaron, pero se han dado hecho muy lamentables en Capital Federal de los que se ha hecho eco la prensa.
    -¿No reconoce que existe un problema sistémico debido a la ausencia de regulación y control estatal sobre las empresas?
    -La responsabilidad es compartida. No eludo la responsabilidad del Estado. Pero es compartida por las instituciones participantes: UOCRA, cámaras empresarias y superintendencia de ART. El hecho de que después queel Estado haga la inspección en las empresas se aflojen los cuidados, tampoco podemos buscar siempre culpables. Si usted va manejando, no se puso el cinturón de seguridad y esto es causal de un accidente grave...
    -¿Pero quién se tiene que poner el cinturón, el trabajador, o la empresa que debe brindar las condiciones de seguridad necesarias para el trabajo?
    -Le repito que es responsabilidad conjunta. El Estado, para exigir el cumplimiento de las normas, y de allí para adelante también cabe la responsabilidad de cada uno...
    -¿En un contexto de alta desocupación y precarización laboral generalizada, existe la posibilidad de que un obrero reclame mayor seguridad en su empresa sin arriesgar la estabilidad de su empleo?
    -Sí. Nosotros desde el Estado estamos para escuchar esos reclamos.


    Pronóstico:
    “La predicción de Menem de que el desempleo estará en el 6 por ciento a fines del ‘99 tiene asidero. Pero si se cumplen ciertas condiciones”.

    En defensa de Yabrán

    -¿No cree que el Gobierno perdió muchísima credibilidad con el tema de Yabrán, que hay un antes y un después de Yabrán para el presidente Menem?
    -Al tema Yabrán se lo ha politizado. Se ha personalizado en él una serie de fantasías. Yo estoy seguro de que en la Argentina hay empresarios mucho más fuertes, que tienen mayores resortes de poder, que tienen una mayor participación en sectores de la vida económica del país. Pero se ha personalizado en Yabrán como si fuera el más poderoso de la Argentina, cuando no es así. Hay empresarios con más ramificaciones en el poder.
    -Pero Yabrán estaba acusado de ser el autor intelectual del asesinato de José Luis Cabezas.
    -En la Justicia, uno es inocente hasta que se pruebe lo contrario. Y hasta ahora no se ha probado que a través de las denuncias de ramificaciones o inserción en el poder se haya cometido delito alguno.
    -Al empresario, antes de suicidarse, un juez le había dictado la captura.
    -Todavía no hubo fallo, sólo la sospecha. Hay que esperar y confiar en la Justicia.