Uno de los principales problemas en la aplicación de la ley de flagrancia en la Ciudad es la falta de capacitación de las fuerzas de seguridad, que se puso de relieve y se agudizó en los últimos años, sobre todo tras la nueva división de las ex comisarías en las actuales Comunas. Según alerta en su informe la Fiscalía Criminal y Correccional N° 16, “las dotaciones actuales de las comisarías cuentan entre su personal destinado a la prevención con submarinistas, integrantes de la banda de música de la fuerza y Prefectura; cuya formación, capacitación, objetivo natural es absolutamente distinto a la  prevención en urbes pobladas”. 

Según le dijo a PáginaI12 la fiscal Mónica Cuñarro, “hasta incluso en las divisiones capacitadas no hay insumos, o reactivos, que son imprescindibles para lograr prueba válida. Esto conspira en el rol, porque la tarea debe ser investigar casos más complejos para desbaratar grandes bandas o crimen complejo”.