Diez días después de irse al pasto antes del despegue , con el precandidato presidencial Juan Manuel Urtubey a bordo, la aerolínea JetSmart vuelve a ser noticia por otro desperfecto. Los pasajeros denunciaron que tuvieron que descender de uno de los aviones de la low cost chilena, minutos antes de despegar, por una falla en las computadores de la nave y volaron siete hora después en un vuelo de la empresa Andes.

"Volando por primera vez por JetSmart en el vuelo WJ 3329. El avión (AIRBUS A320) estaba por despegar del aeropuerto de Córdoba rumbo a Tucumán y nos informan que hay un desperfecto en una de las computadoras y debemos volver a la plataforma", relataba uno de los pasajeros a través de su cuenta de Twitter el inicio del periplo.

El vuelo tenía que partir a las 10 de la mañana del jueves del aeropuerto Taravella, en la ciudad de Córdoba, pero tras detectarse la falla en las computadoras del Airbus, los pasajeros debieron esperar siete horas para finalmente partir en un vuelo de otra compañía. "Aún no se pudo detectar el desperfecto técnico de la aeronave. El vuelo seguirá demorado hasta el próximo aviso", explicó la empresa. El vuelo partió recién a las 17.31.

La solución fue derivar a los pasajeros a un avión de la empresa Andes, mientras que la nave del la low cost chilena —celebrada por el presidente Mauricio Macri en su vuelo inaugural— quedó varado en los talleres de Córdoba. Con la nave prestada, la low cost cubrió los vuelos de Córdoba-Salta, Salta-Córdoba y Córdoba-Aeroparque.

"Mi primera vez. No solo me atrasan 1 hora el vuelo, sino que ahora nos dicen que vamos a volar con un avión de Andes y que en vez de llegar al aeropuerto de El Palomar. Vamos a Aeroparque... excelente empresa. Muy recomendable", denunciaba otro de los pasajeros afectados. JetSmart y FlyBondi son las únicas dos empresas que aceptaron operar desde el aeropuerto habilitado por el ministro de Transporte , Guillermo Dietrich, para su plan de "cielos abiertos".

La política de cielos abiertos , cuestionada por los gremios del sector y celebrada por el Gobierno de Cambiemos como un logro, comenzó a mostrar sus problemas desde el inicio, con desperfectos, demoras y denuncias. Desde febrero, ya mostró un primer signo de congelamiento, con la decisión de Avianca —que inició sus operaciones con una causa por conflicto de intereses con una empresa de la familia presidencial— de dejar de operar momentáneamente.