Investigadores chilenos hallaron alta concentración de arsénico en el cabello de niños que habitan las llamadas “Zonas de Sacrificio”, las costeras Quinteros y Puchuncaví, ubicadas al norte de Valparaiso. Desde hace cinco décadas estas localidades son escenario de intoxicaciones masivas cuando comenzó la instalación de plantas industriales en la zona, varias de ellas con uso o producción de químicos.

"Los niños de 1 a 5 años tienen el doble de concentración de arsénico en su cabello que los niños de 6 a 18 años y hasta el triple que los adultos de más de 18 años", señaló la investigadora Maite Berasaluce, quien realiza un seguimiento de esa situación desde 2016. "Entre más cerca se está del lugar existe mayor concentración de metales en el suelo y en suspensión", dijo Berasaluce en declaraciones al Diario Cooperativo, sobre el análisis que se realizó en seis localidades cercanas al Complejo Industrial de Ventanas, situado unos 130 kilómetros al noroeste de Santiago y consideradas el "Chernóbil chileno" por organizaciones medioambientales.

El estudio pertenece a la Defensoría de los Derechos de la Niñez de Chile y muestra que los menores residentes en esas localidades han sufrido la vulneración de al menos 17 de sus derechos. En la investigación participaron 50 menores afectados, que fueron atendidos en la red asistencial.