El candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, anunció que Cultura tendrá nuevamente el rango de ministerio en su futura gestión presidencial, si las elecciones de octubre ratifican el voto de las PASO. También aseguró que considera “dignos” a los jueces de la Corte Suprema, “aun los que nombró Mauricio Macri”, y que de los jueces federales de Comodoro Py solo quiere “que hagan justicia y que nunca dejen de lado el estado de derecho por una necesidad política de alguien que gobierna”.

Fernández mantuvo un extenso diálogo con el programa Una Nueva Aventura de la AM 750, que buceó en la intimidad del candidato. Pero Fernández tampoco esquivó las definiciones políticas. Repasó las “cinco directrices” que guiaron la presidencia de Néstor Kirchner –a quien consideró “mi gran maestro”– y su gestión como jefe de Gabinete. Habló del aporte que brindó Sergio Massa al triunfo del peronismo en las elecciones primarias y de su relación personal con el Papa Francisco. También  respondió sobre la popularidad que adquirió su perro Dylan.

"Es responsabilidad de todos no defraudar esa Argentina que millones de argentinos votaron el domingo pasado", sostuvo Fernández en la entrevista con Any Ventura y afirmó que “el mayor problema de la Argentina es el hambre. Son esos 25 millones de personas que están por debajo de la línea de pobreza y, si no tienen un auxilio del Estado, no tienen como comer”.

El candidato dijo que era “muy difícil” definir cuáles podrían ser sus primeras medidas de Gobierno y recordó la anécdota del día que Néstor Kirchner asumió la Presidencia y vieron desde las ventanas de la Casa de Gobierno a los jubilados que estaban en Plaza de Mayo. Sin embargo, recordó que la primera medida fue auxiliar económicamente a las provincias de San Juan y Entre Ríos, que hasta aquel 25 de mayo no habían podido empezar las clases por los reclamos salariales de los docentes.

También se refirió a los cuestionamientos que se le hacían a Kirchner por la falta de plan económico. “Teníamos líneas directrices. Había cinco reglas que nosotros respetamos hasta el último día: garantizar el superávit fiscal, el superávit comercial, acumular reservas, tener un dólar competitivo, una moneda que administrara el Banco Central y hacer competitiva la Argentina, y desendeudarnos. Todas las medidas que se dictaban tenían que estar en sintonía con estos cinco principios”, dijo Fernández.

“La política siempre es contradicción de intereses porque uno representa a sectores de la sociedad que están en pugna. Eso pasa en la Argentina y en todo el mundo. Entonces, el secreto es saber qué intereses representás vos y cómo armonizas esos intereses con los otros. Porque decir que yo represento un interés distinto del otro eso no quiere decir que voy a tirar al otro por la ventana”, agregó.

Cuando le preguntaron si Cultura volvería a ser ministerio en su gobierno, Fernández no dudó: "Seguramente volverá el Ministerio de Cultura. Soy un consumidor de la cultura. El Estado debe darle al creador de la cultura garantías y hacer que sean reconocidos sus derechos. La política tiene que llenar la panza de los argentinos con comida y su alma con cultura”, afirmó.

Tampoco hubo dudas cuando lo consultaron por la Corte Suprema y los jueces de Comodoro Py. “Le voy a pedir a la Corte Suprema que sea Corte Suprema. Yo tengo mucho respeto por los jueces de la Corte y así como soy muy crítico de algunos jueces federales, la Corte nunca hizo nada que a mí me hiciera reaccionar en término de derechos. Seguramente dictaron decisiones que no me gustaron o que me gustaron más que otras, pero todo estuvo fundado y los jueces de la Corte son jueces dignos, claramente, aun los que nombró Macri”, dijo.

“La verdad es que hay una sensación bastante entendible de que los jueces federales van acomodándose al calor del gobierno de turno y eso es malo definitivamente. Yo lo que quiero de los jueces es que hagan justicia, que es quizá es lo que se han olvidado de hacer algunos de ellos en los últimos años. Solo quiero que hagan justicia y que nunca dejen de lado el estado de derecho por una necesidad política de alguien que gobierna”, agregó sobre los magistrados de Comodoro Py.

También hubo preguntas sobre el aporte de Massa a la campaña. “Hay todo una discusión sobre lo que Sergio aportaba electoralmente al final del acuerdo. Pero la verdad no era lo que aportaba, era lo que simbolizaba. Nunca nadie habría sentido que la unidad hubiera existido si Sergio estaba en otro lado. Y eso era muy valioso”, contestó Alberto.

"Siempre tuve un vínculo de mucho respeto con el Papa Francisco, quien me recibió varias veces. Por un tiempo estuve muy enojado con la Iglesia, porque no practica valores cristianos como el amor y la preocupación por los pobres, los perseguidos y los marginados. Francisco me reconcilió con la Iglesia", dijo sobre su relación con Jorge Bergoglio. Fernández negó las versiones sobre una supuesta influencia del Papa en su reconciliación con Cristina Kirchner.

Entre las preguntas sobre su vida cotidiana también hubo lugar para la popularidad de su perro: "Dylan es más famoso que yo. La gente me para y se saca una foto con él. Dylan tiene tres años y medio, es un compañero extraordinario. El amor y el compañerismo que me da no me lo ha dado nadie en el mundo, es un amor incondicional", dijo sobre el collie que saca a pasear todas las mañanas.