El delantero Mauro Zárate dejó atrás la lesión muscular que lo mantenía inactivo y entrenó este miércoles a la par de sus compañeros, algo que generó ilusión en Boca porque desean contarlo para los próximos compromisos, en especial las semifinales de la Copa Libertadores de América ante River Plate.

Zárate, de 32 años, había sufrido un desgarro en el soleo izquierdo el 21 de agosto pasado, en la victoria que Boca logró sobre Liga de Quito por 3-0 en Ecuador, por los cuartos de final de la Libertadores, y eso lo hizo perderse cuatro partidos, incluído el superclásico con River que finalizó igualado cero a cero en el Monumental.

Zárate no estuvo en la revancha ante la Liga que finalizó cero a cero en La Boca, tampoco en los triunfos sobre Aldosivi (2-0) y Banfield (0-1), y en el mencionado Superclásico. Y su mejoría no implica que el DT Gustavo Alfaro lo tendrá en cuenta para el partido del domingo en la Bombonera ante Estudiantes de La Plata, por la sexta fecha de la Superliga. La idea idea del DT es que el delantero comience a tomar ritmo recién en la séptima fecha, en el clásico frente a San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro. 

En tanto, los demás lesionados también evolucionaron en la sesión de entrenamiento que se llevó a cabo en Casa Amarilla, aún sin la participación de los jugadores que participaron de la Fecha FIFA. Lisandro López, quien había entrenado en forma diferenciada los dos últimos días por una sobrecarga muscular, se entrenó con normalidad y estaría entre los titulares frente a Estudiantes. También entrenó al mismo ritmo de los demás Nicolás Capaldo luego de haber jugado el domingo para el seleccionado Sub 23 que le ganó a Colombia en el amistoso jugado en la cancha de Argentinos Juniors.

En tanto que, el delantero Eduardo "Toto" Salvio intensificó su recuperación con piques fuertes al costado del campo de juego mientras se repone de un desgarro en el isquiotibial izquierdo se le produjo en la revancha ante Liga de Quito, el 28 de agosto pasado.

Otro lesionado, el delantero Ramón "Wanchope" Abila, afectado por una avulsión parcial (pequeño desprendimiento) del aductor derecho (también en el partido revancha ante los ecuatorianos), sigue entrenando únicamente en el gimnasio del club. 

El delantero cordobés, de 29 años, fue adquirido en las últimas horas en forma total por Boca (le compró el 50 por ciento del pase que estaba en poder de Huracán) y renovó su contrato con el club con una nueva cláusula de rescisión que ahora es de 17 millones de dólares.