Miles de personas marcharon vestidas de negro a lo largo de dos kilómetros en la ciudad de Tue Mun, en Hong Kong. Bajo consignas como "Llévense de aquí a los comunistas", "Recuperemos nuestro Hong Kong" y "Revolución de nuestros tiempos", se dio en esta ciudad la movilización más importante, en el decimosexto fin de semana de manifestaciones pro democráticas. La policía respondió arrojando gases lacrimógenos. Los activistas quemaron una bandera de China y arrojaron bombas molotov. Las manifestaciones en Hong Kong comenzaron para rechazar una ley de extradición a China. La jefa ejecutiva, Carrie Lam, eliminó el proyecto de ley pero no respondió a los demás reclamos, entre los que se destaca un pedido de investigación independiente de la represión policial de las últimas semanas, y elecciones directas.