Desde Paraná

“Asistimos a una crisis económica y social con un severo aumento de la indigencia, la pobreza y la desocupación. Ha llegado la hora de establecer un pacto social y político”, dijo este sábado desde Paraná Jorge Lugones, titular de la Comisión Episcopal de la Pastoral Socia (Cepas) de la Iglesia católica en la apertura de la segunda jornada del encuentro Repensando la Economía. Durante dos días, especialistas de distintas áreas discutieron cómo pensar una Argentina más justa en base a las críticas al capitalismo en su fase actual que plantea el papa Francisco . Lugones aseguró también que parte del futuro “es de los movimientos sociales porque son los nuevos sujetos que Francisco identifica como protagonistas de un cambio que empezó a pensarse desde la época de la emancipación española”. El documento final de la Cepas dice entre sus conclusiones que “la gravedad del momento presente se convierte en un grito humano, especialmente de los pobres y vulnerados, que nadie puede dejar de oír” porque “es un clamor que llega al cielo”.

La Comisión Episcopal de Pastoral social, el brazo político de la Iglesia católica, organiza en los años electorales un evento llamado Repensando la política. Pero este año, sus miembros sintieron que era necesario “repensar la economía” para que tenga un rostro humano. A la vera del río Paraná y durante dos días, economistas, actores sociales y políticos compartieron sus ideas para solucionar la crisis de la Argentina.

Lugones, presidente de la Cepas y obispo de Lomas de Zamora, tiene una excelente relación con el papa Francisco, quien lo formó y lo ordenó obispo. En noviembre del año pasado criticó a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, por la masacre en la comisaría tercera de Esteban Echeverría, en la que nueve detenidos murieron en un incendio. “No nos arrebaten la paz social”, se tituló el documento en el que pedía, junto al obispo de San Justo, mejores condiciones de vida para los presos. Este sábado, su discurso abrió la segunda jornada del encuentro de Paraná, que fue un intento de pensar soluciones de cara a la Argentina que se viene. 

En una de las mesas más importantes, titulada Política y Economía para Latinoamérica, fueron oídos con atención Carlos Heller, presidente del Banco Credicoop, economista y titular del Partido Solidario, y Roberto Feletti, también economista y secretario de Hacienda de La Matanza. “Este gobierno ha tenido éxito porque vino a bajar el valor de los salarios y las jubilaciones y vaya que lo ha logrado. En el futuro, tenemos que recuperar la soberanía nacional y preguntarnos por qué los servicios públicos son brindados por empresas que los entienden como mercancía”, dijo y cosechó un fuerte aplauso. Como ejemplo de la profunda crisis que estamos viviendo producto de un nuevo gobierno neoliberal, recordó que el Frente de Todos tuvo que aclarar en su plataforma de gobierno que "comer es un derecho”. A su turno, Feletti aseguró que hacia el futuro, la Argentina no debería abandonar la relación con Latinoamérica que construyó en la época del kirchnerismo, aseguró que estamos “en un cambio de etapa, en una crisis de deuda clásica en la que se tiene que definir quién paga la deuda, si los tenedores de bonos o los exportadores” y habló del escenario del 2020: un mundo en el que Estados Unidos y China libran una guerra comercial “en la que tendríamos que recuperar la relación con Brasil a pesar de las dificultades de acordar políticas con el presidente Jair Bolsonaro”.

Enrique Martínez Ossola, obispo auxiliar de Santiago del Estero, cerró ese panel con una reivindicación a Enrique Angelelli, que pagó con la vida el compromiso con su pueblo y reivindicó a los jóvenes riojanos de la Iglesia que no olvidan esa lucha. Usó la metáfora de la flor del cactus, que florece en medio de las espinas y llamó a rescatar las utopías y a recordar a los 30.000 desaparecidos de la última dictadura cívico militar.

Lugones había inaugurado temprano la segunda jornada de debate con una conferencia titulada La Patria Grande y el desafío de un nuevo Pacto Económico para la Fraternidad. “Los movimientos sociales son los nuevos sujetos que Francisco identifica como protagonistas de un cambio que comenzó a pensarse hace ya mucho tiempo, ya desde la época de la emancipación española como hasta la construcción de la Unasur. Así, la idea de una Patria Grande se instala, de manera renovada, por la participación de las organizaciones populares y los colectivos de trabajadores y militancias diversas en los espacio públicos, en gran medida gracias al reconocimiento que Francisco ha hecho de ellas”, dijo. Y habló de la crisis de atraviesa la Argentina y de la necesidad de materializar un Pacto Social. “En nuestro país asistimos hoy a una nueva crisis económica y social, con un severo aumento de la indigencia, la pobreza y la desocupación que afecta esencialmente a los más vulnerables, en especial a los pequeños. Ha llegado la hora de dar el paso desde la práctica del Encuentro hacia lo institucional, mediante un Pacto Social y Político que nos comprometa a todos”, propuso. 

El documento final de la Cepas también habla de la urgencia de un pacto social. “Ha llegado el momento de dejar de lado todo lo que nos impide construir un verdadero pacto social y político”, puede leerse en el texto, en el que también se hace referencia “a la gravedad del momento presente que se convierte en un grito humano, en el grito de muchos, especialmente de los pobres y vulnerados y que nadie puede dejar de oír. Es un clamor que llega al cielo”.