En el marco de la caravana de campaña que está realizando alrededor del país, Mauricio Macri volvió a visitar Córdoba, el único distrito junto a CABA donde se impuso en las elecciones primarias. Esta vez protagonizó dos actos cargados de críticas al candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández.

A sólo diez días de las elecciones, Macri hizo escala en Río Cuarto y Villa Carlos Paz. Allí, volvió a hacer referencia al "dedito" de Alberto Fernández durante el debate y ratificó su convicción de que podrá "dar vuelta esta elección". "La gente no quiere más a los prepotentes que se creen los dueños del poder. No queremos deditos que nos disciplinen y nos digan cómo tenemos que pensar o vivir", sostuvo desde la plaza Roca de Río Cuarto. 

Acompañado por su esposa, Juliana Awada, y el diputado nacional de la UCR Mario Negri, Macri volvió a hacer chistes sobre las afirmaciones de Alberto Fernández durante el debate, en las que había dicho que los jubilados no tenían celulares porque "no podían pagarlos". Bromeando con los asistentes del acto, el Presidente se dirigió hacia una señora mayor que se encontraba en el público y le quitó el celular diciéndole: "Abuela te saco el teléfono porque no lo podés tener". Macri ya había hecho el mismo acting en Paraná, pero terminó frustrado cuando la señora del caso le respondió que, en realidad, no tenía celular.

Durante su estadía en Córdoba, Macri concedió varias entrevistas radiales, en las que volvió a atacar al candidato opositor por sus dichos durante el debate presidencial: "Decir que la plata del FMI se fugó o se la llevaron mis amigos es una acusación al aire de alguien que fue a agredir desde el minuto cero, la plata del FMI fue para pagar las deudas que dejaron ellos". A su vez, el Presidente cuestionó al informe que la Comisión Provincial de la Memoria presentó ante el juez Alejo Ramos Padilla, en el que se denuncia a una banda de espionaje ilegal, vinculada al oficialismo, y con cómplices en los ámbitos periodísticos y judiciales.