Y el clásico de todos los días posteriores al debate presidencial salió a relucir. Cada candidato enunció su balance, que siempre lo da al otro derrotado. Por eso, tal vez, después de la reunión de gabinete, dejaron trascender que Mauricio Macri dijo que lo vio a Alberto Fernández muy incómodo y que "no se siente ganador". Del otro lado, el candidato del Frente de Todos dijo "Macri ya es parte de la historia". No faltaron los que proclamaron ganador a uno u el otro, como ocurre después de cada contienda de este tipo. En Twitter, compitieron los hashtag #MacriMentiroso contra #SiSePuedeJujuy, por la marcha que protagonizó el presidente.

Lo que más se comentó fue el perfil más de confrontación que eligió Macri con respecto al primer debate y que dejó contentos a los oficialistas. "Que Macri se quede en la grieta, el resto de los argentinos se tienen que abrazar y seguir adelante. Macri ya es parte de la historia", le contestó Fernández, quien dijo: "Macri está resolviendo las cosas que ya no puede resolver, pero celebro que se ocupe del desastre que organizó. Hace cuatro años gobierna la Argentina, parece que no se enteró". También le bajó el tono a la "marcha del millón" del sábado: "A lo largo del país nosotros también hicimos marchas de 50 mil o 60 mil personas, pero es la gente que nos sigue, acá es lo mismo". También buscó desdramatizar la transición: "Pierde Macri, asume otro, no pasa nada. En todo caso mucha gente estará feliz. Que no se vuelva a enojar y vuelva a llamar al Banco Central para que liberen el dólar, que fue lo que hizo la vez pasada", lo acusó.

Fernández también dijo que una discusión que habrían tenido en una de las pausas por la mención a Franco Macri ""no fue nada importante, yo tengo mi opinión sobre Macri". Sí aclaró: "No está en condiciones de llamarme inmoral". Fernández también comparó las políticas de Ecuador y Chile: "Son políticas de la misma lógica y en algún momento la gente se siente mal, porque el ajuste siempre lo hacen los mismos".

En tanto, el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, consideró que Fernández "fue sin dudas el ganador del debate. Yo lo vi muy alejado de la realidad a Macri y, en muchos aspectos, eso implica desconocer o mentir en torno a situaciones o por lo menos lo que expresó no corresponde con la realidad". “Alberto Fernández fue claro con las propuestas para sacar a la Argentina de la crisis y puso el foco en remarcar que hay un presidente disociado de la realidad que transita la Argentina”, sostuvo Nicolás Trotta, el coordinador de los equipos técnicos del Frente de Todos.

Por su parte, tras la reunión de Gabinete los ministros insistieron en que el ganador fue, en verdad, Macri. "El gran ganador del debate es la ciudadanía", el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, quien sostuvo "se notó cómo esto incomodaba a Alberto Fernández cuando se hablaba de corrupción". "Uno lo veía irritable cuando se hablaba de corrupción, es entendible porque piensen ustedes que para Alberto Fernández criticar la corrupción K es como ver a Grabois criticar a los piquetes", insistieron junto con el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Este último aseguró que hay "un movimiento muy fuerte en la ciudadanía de un Nunca Más a la corrupción y a la impunidad".

Al coro se sumó el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, quien buscará disputarle a Macri -o, eventualmente, a Horacio Rodríguez Larreta- el rol de jefe de la oposición.  "No hay enamoramiento por Alberto Fernández", aseguró. También aseguró que "lo incomodó" que le preguntaran sobre la corrupción. Cornejo aclaró que en caso que pierdan, "es imprescindible mantener a Cambiemos unido y vamos a colaborar con eso". 

Por su parte, el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi,  se quejó de que Fernández hablara de Franco Macri. "Hay límites que nunca se deberían traspasar", cuestionó el encargado de despedir periodistas de Télam. Lombardi obvió el hecho de que, en rigor, Fernández le recordó a Macri que él mismo trató a su padre de delincuente una semana después de su muerte. "No se fue enojado pero admitamos que el comentario sobre el padre de Macri fue sumamente desagradable", aseguró Lombardi.