El tour presidencial del “Sí se puede” llegó a San Salvador de Jujuy en forma de marcha por el casco céntrico de la ciudad, para culminar con un acto en un escenario montado en la Plaza Belgrano, pegado a la casa de Gobierno provincial, en medio de un impresionante operativo de seguridad. “No nos vamos a quedar callados viendo cómo nos roban el futuro. El dedito, el atril, la prepotencia, la canchereada: la forma de ejercer el poder que no queremos más”, arrancó Mauricio Macri. Luego arengó a sus partidarios a “convencer a los amigos, compañeros de trabajo y familiares que todavía dudan” para "dar vuelta” la elección que para el Presidente “no sucedió”, y en la que quedó 16 punto debajo de la fórmula del Frente de Todos.

La caravana salió desde el Parque San Martín y recorrió las 15 cuadras del casco céntrico de San Salvador en la caja de una camioneta 4x4, con la compañía del gobernador radical Gerardo Morales. La recorrida por las angostas calles jujeñas iba precedida por un locutor que invitaba a corear las consigas del “Sí, se puede” y pedir “para Mauricio la reelección”. Otra camioneta con un potente equipo de sonido repetía una y otra vez una canción de Soledad (“Yo quiero a mi país”) y la versión de “No me arrepiento de este amor” de Gilda, con un estribillo cambiemita: “Con Mauricio, María Eugenia, con Pichetto y Larreta la vamos a dar vuelta”.

Arriba del escenario, Morales tuvo el rol de telonero. Le regaló a Macri la réplica de la bandera de “la libertad civil” con que Belgrano homenajeó al éxodo jujeño durante la guerra de la independencia. Exaltó la “madera” del Presidente para “sobreponerse al resultado del 11 de agosto” y tener la “energía para recorrer el país”. “Te necesitamos como Presidente para conservar la paz que logramos. Es la única garantía”, dijo Morales.

Arriba del escenario, Macri repitió el mismo repertorio de todo su tour proselitista. “Muchos mirábamos la política, no me voy a meter, me da miedo. Lo hicimos durante mucho tiempo y nos equivocamos. Permitimos que una minoría tome control del país y se apropien del Estado. Quisieron ir por nuestra libertad. Basta, se acabó, hasta acá llegaron. Este es nuestro país”, dijo Macri a los jujeños sobre los adversarios que lo vencieron en las PASO, mostrándose como un offsider de la política. “Borombombón para Mauricio la reelección”, le respondieron.

“Más fuerte. Quiero que se escuche hasta Bolivia. También en Bolivia se tienen que respetar las libertades”, incentivó Macri, lejos de cualquier gesto diplomático de un Presidente a la hora de imponer sus ideas.

“Quiero preguntarles muchas cosas”, continuó Macri para reproducir el acting hasta llegar al final del interrogatorio pautado, preguntando “dónde estabas papá, mamá, abuela en octubre de 2019". “Estábamos haciendo patria”, respondió la multitud diciplinada. La introducción “familiar” fue luego de que Macri subiera al escenario a chicos con sus caras pintadas de gato, una nena de ella con una remera del “Sí, se puede” y otra con la leyenda “Yo rezo por vos”. Macri pidió a sus seguidores que le cantaran el feliz cumpleaños a una de ellas.

“Quiero compartir esta sana locura. Esta energía en acción”, pidió. Mostrando un celular, propuso “este aparatito que nos dio tanta libertad”, para convencer “a los que todavía dudan” y “fiscalizar” el domingo. Sus seguidores corearon “Sí se puede”.