Lo que el PRO no pudo lograr en el Congreso nacional, lo obtuvo en la Legislatura: una declaración sobre Bolivia que no habla de golpe. Con una mayoría atronadora, el oficialismo impuso su criterio en la declaración que emitió la Legislatura porteña, que expresó "su enorme preocupación ante la interrupción del orden constitucional en el Estado Plurinacional de Bolivia y brega por una región en paz, con instituciones fuertes y sin violencia". Fue aprobada por 31 votos contra 13 negativos y 11 abstenciones. Las bancadas opositoras cuestionaron que la declaración no habla de "repudio" y no incluye las palabras "golpe de Estado". 

"Nos indigna y avergüenza el comportamiento del presidente Macri. Nosotros tenemos un posicionamiento que es histórico. No hay eufemismos, esto es un golpe de Estado cívico, militar y policial, y pasó acá al lado", planteó la legisladora Victoria Montenegro. Por su parte, Carlos Tomada reclamó que "el Gobierno se defina, que se repudie el golpe de Estado, que no se reconozca a presidentes autoproclamados y se manifieste la más absoluta solidaridad al pueblo boliviano".