El abogado del Sindicato de Obreros y Empleados del Ingenio La Esperanza (SOEAILE), Enrique Wandschneider, ratificó que son 12 las personas muertas en el incendio del Ingenio La Esperanza en San Pedro de Jujuy según la información que tiene el s indicato en su poder. Oficialmente, el fiscal Ernesto Elian Resúa, informó que los muertos serían ocho, de los cuales cinco corresponden a los cuerpos encontrados el primer día y tres son personas que permanecen en calidad de desaparecidas.

Resúa y dos ayudantes fiscales, cuyas oficinas funcionan en la vecina ciudad de San Pedro de Jujuy, estuvieron hoy otra vez en el ingenio, que desde temprano fue rodeado por familiares de trabajadores que esperan novedades sobre las víctimas. Sobre el mediodía el fiscal informó que se retiraron cinco cuerpos, uno de ellos fue identificado a simple vista y fue entregado esta mañana a sus parientes. Los otros cuatro resultaron calcinados y están irreconocibles, por lo que se les tomaron muestras para hacer un cotejo genético.

Además, en la Seccional 25 de la Policía jujeña se presentaron cinco denuncias de trabajadores que no han regresado a sus hogares, informó el fiscal, quien, sin embargo, añadió que esta mañana el ingenio informó a la Fiscalía "que son tres personas las que no han sido halladas aún". Resúa dijo que la conclusión lógica es que esas tres personas están fallecidas, con lo que la cifra oficial de víctimas fatales llega a ocho. Y hay tres heridos, dos de gravedad.

Resúa dijo que la prioridad es identificar los cuerpos y "tratar de obtener los cuerpos si están dentro del ingenio", pero explicó que esto último se complica porque es difícil ingresar a la nave principal, la destilería, porque "hay mucho riesgo de derrumbe". Informó que los bomberos y técnicos de criminalística que ingresaron "están haciendo trabajo de enfriamento por un lado y por otro lado están trabajando a ver si obtenemos datos a ver dónde podrían estar estos cuerpos para ingresar" a buscarlos.

El fiscal dio esta información cerca del ingenio, debajo de un árbol frondoso que mitiga un poco los calores de estas tierras. Cerca, bajo la misma sombra, escuchaba el abogado del gremio. "No estoy de acuerdo con el número de muertes que se da de los compañeros", sostuvo ni bien fue consultado por Salta/12.

"Nos están diciendo desde distintas morgues el número de compañeros fallecidos que hay, fruto de asfixia, de estar quemados, entonces me parece una posición muy cruel, sobre todo respecto a los familiares de los trabajadores. Muy cruel, que se mienta sobre el número de las víctimas me parece realmente grave", aseguró. Y detalló: en la morgue del Hospital Guillermo Paterson, de San Pedro, hay ocho cuerpos; tres están en la morgue del Hospital "Dr. Oscar Orías", de Libertador General San Martín (donde está el ingenio Ledesma) y uno está en el Hospital Pablo Soria, de San Salvador de Jujuy.

Las causas del siniestro

El incendio comenzó ayer a la tarde, tras la explosión de tanques en el sector de destilería del establecimiento.

Si bien algunos trabajadores que se animaron a hablar relataron que hacía dos días había un cable suelto con chispas, la Fiscalía todavía no considera ninguna hipótesis, dijo Resúa.

El fiscal penal y el abogado del Sindicato tampoco coinciden en este aspecto. Resúa indicó que "la carátala de la causa es para establecer causales del incendio por un lado y por otro lado para establecer e identificar a las personas y que puedan ser entregadas", e insistió en que para avanzar tratar de establecer la causa del siniestro deben esperar los resultados de las pericias.

Para Wandschneider, "se está evitando caratular". "Se habla de actuaciones informativas" cuando "la carátula que corresponde es estrago doloso agravado", afirmó el abogado, quien consideró "muy grave que la justicia no empiece por ese lado" porque no se están tomando las medidas necesarias para preservar las pruebas. "(El fiscal) no está deteniendo a nadie, las pruebas se pueden hacer desaparecer. Pruebas que tienen que ver con los estudios de higiene y seguridad, de tratamiento de fuego, de medioambiente laboral, eso en este momento tranquilamente se podrían estar haciendo desaparecer por la parte empleadora", aseguró.

Wandschneider recordó que el secretario general del SOEAILE, Sergio Juárez, denunció fallas de seguridad en cuatro audiencias "delante de la empresa" y "ante la Secretaría de Trabajo de la Nación", realizadas hace tres meses, dos meses y un mes y medio. Por su parte, Juárez denunció, en declaraciones radio Conectar, que la Policía presionó a un sereno para que dijera que el incendio fue provocado por una falla humana: "Van a querer culpar a los trabajadores", advirtió.

Wandschneider insistió en que el Ingenio La Esperanza "está absolutamente precarizado" en su infraestructura "falta todo, cableado, justamente es lo que ha producido el incendio, las chispas. Ese cableado estuvo dos días tirando chispas sobre el piso hasta que pegó en el alcohol". Recordó que el grupo tucumano Budeguer se había comprometido a invertir entre 2 y 3 millones de dólares en infraestructura "y es mentira", porque, de haber esa inversión en acondicionamiento de las instalaciones, "podríamos haber evitado estas muertes y esta tremenda explosión".

El secretario general del NOA de la Federación de Empleados de la Industria Azucarera, Mariano Cuenca, añadió que las fallas de seguridad se dan en todos los ingenios, y que se han hecho reclamos formales de manera insistente. En particular, destacó que hicieron denuncias por la falta de infraestructura en el ingenio San Isidro, en Campo Santo, Salta, pero nunca recibieron respuestas de la Secretaría de Trabajo de la provincia.

Un pueblo en un ingenio

La Esperanza es un pueblo chico, formado por trabajadores y ex obreros del Ingenio, cuya planta está en medio de la urbanización y cuyas tierras rodean al conjunto de casas de la población. Está encuentra a 3 kilómetros de San Pedro, ciudad distante a poco más de 63 kilómetros de la capital jujeña, San Salvador, y 115 kilómetros de Salta Capital.

Como en otros pueblos cañeros creados a partir de un ingenio, todo gira en torno del gran empleador, que concentra en sus cercanías la escuela, el hospital, una pileta, el viejo club social (hoy en abandono) y hasta un cine que años dejó de funcionar. Esas muestras de un mejor vivir conviven, sin embargo, con la montaña de bagazo, el desecho de la caña de azúcar, que demanda cierto acostumbramiento para que deje de molestar. Esa montaña, al costado de la destilería que ardió y de un gran tanque de alcohol, también comenzó a quemarse. Esta tarde todavía salía humo de algunos lugares, pero el fuego parecía estar apagándose.

Las casas más cercanas al establecimiento fueron evacuadas. Las familias fueron recibidas por parientes y en centros vecinales y clubes deportivos de San Pedro.

El fuego fue sofocado recién a las 8 de la mañana de hoy, precisó el jefe de Bomberos de Jujuy, el comisario Carlos Mamaní.

En las tareas trabajaron 36 bomberos de la provincia de Salta, que fueron a La Esperanza desde Orán, Mosconi, Metán, Aguaray y General Güemes con dos auto bombas de ataque continuo con sistema de espuma química y un camión cisterna, también fueron especialistas en socorrismo, de rescate en estructuras colapsadas y personal de ataque contra incendios industriales.

El gobierno de Jujuy declaró dos días de duelo, luego de que el gobernador Gerardo Morales y otros funcionarios provinciales concurrieran a La Esperanza a interiorizarse personalmente de la situación. "Estoy conmovido y angustiado por los trabajadores que no pudieron sobrevivir a esta fatalidad", sostuvo Morales en una declaración pública difundida anoche.

Anoche también estuvo en el lugar del incendio el intendente de La Esperanza, Ramón Carrizo, pero no fue bien recibido por los trabajadores y familiares que aguardaban noticias. Es que Carrizo es de Cambiemos y en la memoria local todavía están frescos los despidos, y la feroz represión, dispuestos por el gobernador antes de entregar la explotación al grupo tucumano.