“Este tribunal decidió en pleno que había que transmitir determinados juicios. ¿No les parece que tiene impacto que la vicepresidenta de la República esté sentada acá acusada de asociación ilícita, de ser 'la jefa de la banda'? ¿En serio me lo dicen?”, lanzó Cristina Kirchner señalando a los jueces. Los acusaba porque finalmente el TOF2 no hizo lugar al reiterado reclamo presentado por su letrado, Carlos Berarldi, para que la indagatoria fuera transmitida por el Centro de Información Judicial. “Dadas las garantías constitucionales vulneradas y la gravedad institucional del caso, hago expresa reserva de acudir, de ser necesario, ante la Cámara Federal de Casación Penal y la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, había solicitado el abogado en un nuevo escrito.

Los jueces negaron la solicitud, a pesar de que los defensores de los otros imputados señalaron que no tenían inconveniente si se habilitaba la transmisión. Uno de los abogados de Julio De Vido, Gabriel Palmeiro, pidió la palabra al inicio de la audiencia y planteó que la posición de la defensa no era “obstáculo alguno ni se vería vulnerado el principio de igualdad" si la declaración de CFK era transmitida. El Tribunal había argumentado que no se podía hacer diferencia con el resto de los acusados, cuyas indagatorias no fueron televisadas. El abogado de Periotti, Federico Paruolo también manifestó esa postura, "entendiendo que no perjudica en nada" la publicidad del acto, dijo.

“Por si alguien tenía alguna duda (la denegatoria de la transmisión) es una clase práctica del lawfare en la Argentina, llevada a cabo por este tribunal", lanzó Cristina al comenzar su alegato. A pesar de los argumentos, no se pudo tomar registro audiovisual. Los videos y audios que trascendieron fueron tomados de manera clandestina por algunos periodistas y medios de comunicación, hecho que llevó hasta la sala de prensa al jefe de Seguridad de Comodoro Py.