La tensión en España por la cuestión catalana sumó un nuevo capítulo hoy con la destitución del presidente de la Generalitat, Quim Torra, tras el fallo de la Junta Electoral Central, que por siete votos contra seis dio lugar al recurso del Partido Popular, Ciudadanos y el ultraderechista VOX. 

Torra fue cesado como diputado autonómico por la Junta, y como el Estatuto catalán determina que el presidente del gobierno regional debe ser un diputado, Torra tendrá que dejar la presidencia de la Generalitat, a pesar de que anunció que apelará la sentencia. El ahora ex diputado advirtió que se trata de "un golpe de estado a las instituciones catalanas". Mañana habrá una sesión de urgencia del parlamento regional y no se descarta que la mayoría nacionalista “blinde” a Torra.

El 18 de diciembre pasado, El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña había decidido inhabilitar a Torra durante 18 meses por desobediencia, acusado de no haber retirado de los edificios públicos catalanes, durante la campaña de abril, los mensajes y símbolos a favor de los políticos independentistas presos por el intento secesionista de 2017, por el cual recibieron condenas en octubre último.

Manifestación en favor de Torra, este viernes, en Barcelona. EFE

Los partidos de derecha entendieron entonces  que el fallo inhabilitaba a Torra para continuar como diputado y, por ende, como jefe del gobierno catalán, y presentaron el recurso que desencadenó el ajustado fallo de este viernes. La decisión se conoció pocas horas antes de la sesión de investidura de Pedro Sánchez, en plena polémica por el acuerdo de los socialistas con Esquerra Republicana de Catalunya para apoyar la formación del gobierno de coalición de Sánchez con Unidas Podemos.

El acuerdo de los socialistas con ERC, ahora resquebrajado, contemplaba la abstención de sus diputados para facilitar la investidura de Sánchez a cambio de la creación de una mesa de diálogo sobre Cataluña, que podría derivar en un referéndum sobre la cuestión. 

Justamente, el líder de ERC, Oriol Junqueras, fue uno de los condenados por el intento independentista y la Junta Electoral Central determinó, en base a un recurso del PP, que no puede asumir como diputado en el Parlamento Europeo, un cargo para el que compitió antes de ser condenado. El Tribunal Supremo de España no lo dejó salir de la cárcel para asumir, aunque hace pocos días el Tribunal de Justicia de la Unión Europea determinó que goza de inmunidad y debe ser excarcelado. Ahora, falta notificar al Parlamento Europeo.

El doble fallo contra el nacionalismo catalán derivó en masivas marchas en Barcelona con cintas amarillas, símbolo del reclamo por los independentistas presos, e incluso se arrió la bandera de España del edificio de la Generalitat.

Mientras tanto, el titular del PP, Pablo Casado, pidió a Sánchez que rompa "sus pactos con los independentistas", al tiempo que el líder de VOX, Santiago Abascal, reclamó el envío de la Guardia Civil a Cataluña para detener a Torra.