Desde Jerusalén 

"Seguimos dialogando. Hay bonistas que ya aceptaron la propuesta de la Provincia pero hay otros con los que veníamos dialogando la posibilidad de extender el plazo, de forma tal que se decidió ese paso", explicó el gobernador Axel Kicillof la decisión que tomó el miércoles de estirar una semana la negociación por la deuda. Kicillof acompañó a Alberto Fernández en el Foro Internacional por la Conmemoración del Holocausto y volvió al hotel King David muy interesado por el direccionamiento político que cada presidente que habló le había dado a su discurso. Pero, más allá de eso, comentó que nunca dejó de tener un ojo puesto en lo que se discutía en la provincia vía contacto telefónico. Insistió en que la propuesta de estirar los vencimientos de pagos de capital hasta mayo es una propuesta muy razonable y que para esa fecha la Nación ya tendrá resuelta su renegociación, a la que entonces Buenos Aires podrá replicar.

A poco de llegar a Israel, Kicillof visitó justo al secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, el Centro tecnológico Shimon Peres para la Paz, en Tel Aviv, con el que quedó en contacto, muy interesado por algunas cuestiones en la que los israelíes son vanguardia, como por ejemplo sus técnicas con el manejo de los recursos hídricos. Buenos Aires se da que hay zonas inundadas y otras con sequía. También le mostraron trabajos de avanzada en materia de salud y en informática. Es la primera vez que Kicillof visita Israel. Al respecto, aclara que si bien su familia es de origen judío, ya van dos generaciones que no practican la religión. 

Ayer, en tanto, no sólo acompañó a Alberto Fernández y llegó a saludar a algunos mandatarios , como el vicepresidente norteamericano Mike Pence. También le hizo de fotógrafo en algunos momentos, porque no dejaban pasar cámaras de las delegaciones en el recinto donde se hizo la ceremonia. Pero, más allá del pasatiempo fotográfico, la preocupación a la distancia fue por lo que sucediera en la Provincia, a la que no dejó de prestarle atención. "Ahora hasta en el avión tenés conexión a internet", comentó.

"Asumimos el día 11. El día 20 convocamos a los bonistas de todas las series. Después vinieron Navidad y Año Nuevo, que son épocas dificiles. El día 7 de enero convocamos formalmente a los bonistas de esta serie y el día 14 presentamos la propuesta. Venimos haciéndolo lo más aceleradamente posible", repasó Kicillof la actitud llevada adelante desde que está a cargo de la gobernación respecto de la deuda, una bombita que le dejó María Eugenia Vidal. 140 mil millones de pesos de capital y 84 mil millones de pesos de intereses vencen sólo este año. 

Kicillof insitió en diálogo que mantiene abierto con los bonistas, que espera que sea "de buena fe" y que se encuentre una solución que resulte "lo más ordenada posible". Aseguró que ese canal de diálogo lo hacía sentirse optimista en cuanto a la resolución de la situación. "Esperemos que lo antes posible tengamos una propuesta que sea aceptada por todos los bonistas", se esperanzó en unas breves declaraciones a los periodistas que cubren la visita presidencial en el lobby del hotel mientras Alberto Fernández estaba reunido en un salón del subsuelo con familiares y amigos de desaparecidos de Israel.

El gobernador no quiso comentar con qué porcentaje de bonistas mantenían ese diálogo, dijo que era muy complicado de precisar. Porque hay algunos fondos que dicen manejar una parte importante pero que eso es de difícil comprobación, no se termina de saber realmente hasta que llega el momento de mostrar los papeles. Una de las preguntas a la comitiva argentina era si valía la pena jugar tan al filo en este primer vencimiento que es por una cifra no muy grande de 250 millones de dólares. Uno de los integrantes respondía que sí, porque eso marcaba también el resto de las negociaciones. "No es una partida de ajedrez. Son simultáneas de ajedrez, porque el que tiene estos bonos es muy probable que tenga otros bonos provinciales y también bonos nacionales. Entonces con esta negociación también se juega cosas en todas las otras", argumentaba.

Kicillof no quiere que la discusión por la deuda detenga el resto de la gestión. Por eso, el lunes anunciará un plan de obras para poner a punto mil escuelas bonaerenses que tienen graves problemas de infraestructura. Y se muestra seguro de que planes anunciados por el gobierno nacional como el de la lucha contra el hambre y el de obras públicas servirán para reactivar la economía bonaerense.