Vecinos de la localidad de Pichanal, del departamento de Orán, se presentaron en las oficinas que Aguas del Norte tiene en la localidad para  llevar las 250 firmas con la que piden que el servicio de agua potable sea analizado

Denuncian que desde diciembre el agua sale turbia, con olor y mal sabor, lo que ocasionó que existan internaciones de niños por diarreas y vómitos.

El militante del Movimiento Evita, Jocha Castro Videla, contó a Salta/12 que “en el verano es alto el consumo y no hay capacidad” del servicio. “Empieza a haber menos presión para las casas”, explicó.

Sin embargo, consideró que este verano “es el peor que estamos viviendo”. Acusó que el agua “sale turbia, con olor y con mal sabor”. “Acá en Pichanal la problemática con el agua es una cuestión histórica”, relató. Son alrededor de 5 mil las familias que viven en Pichanal y que ahora se ven afectados por el mal servicio.

“Armamos un petitorio y pedimos a la empresa que haga análisis al agua y que de a conocer el resultado de manera pública”, dijo Castro Videla quien entregó el petitorio junto a 250 firmas de vecinos.

Mientras Castro Videla entregaba el petitorio, afuera se encontraban más de 40 vecinos a la espera de una respuesta. El empleado de la entidad manifestó que el petitorio se transmitiría a las oficinas centrales. “Quedamos a la expectativa de novedades para la semana que viene”, expresó el militante.

Algunas de las situaciones que estuvieron percibiendo los pichanalenses tiene que ver con el incremento en los casos de diarreas y vómitos en los menores de edad, lo que provocó que exista un número mayor de internaciones en el Hospital de Orán, contó Castro Videla.

Dijo que toda la población se ve afectada en “diferentes grados”, “pero que, en definitiva, el agua que nos sale es un asco”. Denunció que la situación viene desde diciembre y que, ante la ausencia de respuestas, varios vecinos decidieron levantar firmas para presentar a la empresa.

Mientras, el empleado de la oficina les dijo a los vecinos que también debían buscar el número de usuario y a partir de ahí realizar el reclamo. En tanto, desde la oficina central en Capital, dijeron a este medio que aún no habían tenido la recepción de la problemática de Pichanal.

Ni de aquí ni de allá

En Pichanal existe el caso particular en donde cuatro comunidades del pueblo ava guaraní no abonan el servicio del agua por un convenio que se firmó entre las comunidades y la municipalidad. Sin embargo, también se ven afectados por las falencias en el servicio.

Efectuaron el reclamo junto a sus vecinos, pero desde la empresa les dijeron que a ellos no le competía brindarles una solución porque su acuerdo era con la municipalidad.

La integrante ava guaraní y miembro del asentamiento Las Tres Palmeras, Micaela Tercero, contó que “no podemos reclamar porque el problema es municipal”. Dijo que el acuerdo se firmó con el anterior intendente, Julio Jalit. Y que, además, el año pasado se instaló una bomba de agua para lograr mayor presión.

No obstante,  dijo que la bomba se instaló cerca del pozo en el que colocaron un poste de luz, lo que generó una alteración en el líquido. “Hay dolor de panza, vómitos, diarreas” por el lugar en donde se ubica la bomba. Tercero supone que la afectación tiene que ver con una posible contaminación por la colocación de los postes de luz.

Además, afirmó que “andaba averiguando en el centro y hay mucha gente que tiene problemas”. “El agua sale salada y con mal olor”, sostuvo. Esta redacción intentó comunicarse con el actual intendente, Sebastían Domínguez del Frente Sáenz Gobernador, pero no obtuvo respuesta.