La Asamblea de Trabajadores Residentes y Concurrentes de Ciudad de Buenos Aires participó de la primera mesa de trabajo con funcionarios del gobierno porteño, oportunidad en que presentaron un pliego de "reclamos inmediatos" como base de la discusión de la que surgirá una ley de la actividad.

Luego de las masivas movilizaciones de noviembre y diciembre pasado, en las que consiguieron torcer el brazo de la administración de Horacio Rodríguez Larreta, quien había promovido una norma regresiva, sin haber consultado a los profesionales involucrados y había obtenido una votación irregular en la Legislatura, acompañada por represión , el vocero de las asambleas, Sebastián Goin, advirtió que "la situación salarial, la reducción de la jornada laboral y la precarización de los concurrentes son cuestiones inmediatas a resolver, más allá de los tiempos de elaboración de una ley". 

Tras la suspensión de la ley de Residentes , las asambleas de los 29 hospitales y los Centros de Salud (Cesac) continuaron debatiendo el boceto de una norma representativa del trabajo que realizan día a día residentes y concurrentes y llegaron a la reunión de este mediodía con el llamado a un cese de actividades.

"Las asambleas están instaladas en todos los hospitales, son nuestro capital y son vitales para la elaboración de la nueva ley. El Gobierno nos convoca porque sabe que no hay intermediarios, que representamos los reclamos de todas y todos los residentes y concurrentes, y que planteamos cuestiones de base, de todos los días", agregó Goin en diálogo con PáginaI12.   

La apertura de la mesa de trabajo estuvo encabezada por el subsecretario de Planificación Sanitaria, Daniel Ferrante, y el director general de Docencia y Capacitación, Gabriel Villa Monte. A la misma instancia se sumará la UBA, la Asociación de Médicos Municipales, la Federación de Profesionales del Gobierno de la Ciudad —que acompañó el cese de actividades convocado este mediodía— y representantes de la Comisión de Salud de la Legislatura.  

El pliego de tres puntos de resolución "inmediata" concentró la atención del primer encuentro: salario equivalente al cargo inicial de médico de planta, actualizado a partir de la paritaria, con participación de los residentes; una jornada laboral semanal de 48 horas  —las 64 horas vigentes no se respeten y hay residentes con jornadas de hasta 100 horas semanales— y el reconocimiento de les concurrentes como trabajadores, con derecho a salario y ART. En la actualidad se trata de 1440 trabajadores ad honorem sin ningún tipo de cobertura.  

Goin, residente del Hospital Argerich, valoró como "positivo" el primer encuentro con los funcionarios porteños y adelantó que antes del viernes esperan la convocatoria a una nueva reunión, en la que confían contar con una respuesta del Gobierno porteño. En caso contrario, convocarán a una movilización el próximo 2 de marzo.

De cara a la discusión de fondo, la asamblea general de residentes y concurrentes alcanzó un primer documento de 12 puntos, que incorporarán a la mesa en los próximos encuentros. Los primeros dos exigen "los mismos derechos y obligaciones que el conjunto de les trabajadores de la salud" y abrir un proceso participativo en la asignación de la tarea a desempeñar. 

El mismo documento propone que la formación de postgrado que realizan se realice  bajo la supervisión de un jefe votado por los residentes y concurrentes de cada servicio, con un tope de 10 personas por grupo y con la posibilidad de concursar ese cargo jerárquico una vez terminada la formación.  El documento también solicita que cada residencia cuente con, al menos, un instructor destinado a las funciones académicas del proceso de formación.   

Por otra parte, el documento exige eliminar el "régimen disciplinario", que se intentó instaurar con la ley derogada en diciembre pasado; y propone establecer un ente fiscalizador central de las condiciones y ámbitos de formación de las diferentes especialidades y sedes formadoras para "evitar todo tipo de maltrato, acoso, abuso de poder y violencia".