Unión se clasificó por primera vez a la segunda fase de la Copa Sudamericana luego de caer el año pasado en primera ronda frente al posteriormente campeón Independiente del Valle de Ecuador, pese a perder 2-0 en Brasil ante Atlético Mineiro, ya que lo había vencido 3-0 en el partido de ida disputado en Santa Fe.

Pero si la idea de aguantar la diferencia bien lejos del arco de Sebastian Moyano era la que el técnico Leonardo Madelón le había inculcado a sus dirigidos para la primera parte del partido, o estos no lo interpretaron o directamente no supieron, o no pudieron hacerlo.

Los brasileños fueron claramente superiores durante esos 45 minutos iniciales y no terminaron recuperando el 0-3 de la ida por pura casualidad, léase la punta del pie derecho de Moyano en una salvada providencial cuando el período expiraba.

Para que eso ocurriera previamente los dirigidos por el venezolano Rafael Dudamel se habían puesto en ventaja sobre el cuarto de hora con un golazo de tiro libre de su compatriota, Rómulo Otero, y antes de los 30 minutos por un penal inexistente del joven (21 años) zaguero Franco Calderón que convirtió Hyoran.

En el segundo período Unión mostró otra postura, más cercana a la que incialmente no había podido ejecutar pese a los gritos que desde el lateral Madelón les trataba de recordar a sus futbolistas. Lo único alentador que había encontrado entre tantas desventuras el conjunto santafesino en esa etapa inicial había sido el punto débil que tenía su rival cuando de juego aéreo se trataba, ya que estando 1-0 abajo hasta pudo empatar con un cabezazo del experimentado capitán Jonathan Bottinelli que rebotó en el palo izquierdo.

La posesión de Unión le permitió descansar por uno buen tiempo a su defensa y particularmente a su arquero, Sebastián Moyano, que terminaría convirtiéndose en gran figura como en el cotejo de ida en Santa Fe, cuando hasta contuvo un tiro penal sobre la hora.

Cuando Dudamel sacó del campo extrañamente a la figura de su equipo, el también venezolano Otero, por un intrascendente Marquinhos, ya Atlético Mineiro perdió ese manejo del balón que lo había caracterizado en la cada vez más lejana etapa inicial, cuando el sueño de dar vuelta la serie se acercaba mucho a la realidad.

Si de esfuerzo se trató, y también de buen juego, fue encomiable el del ingresado Franco Troyanski, que con despliegue y fútbol se encargó de tener preocupada a la defensa local durante todo el segundo tiempo.

Por eso el festejo del final, con la mancomunión entre jugadores llorosos, hinchas llorando y cuerpo técnico lagrimeando. La siguiente instancia del certamen contará con los accesos a la misma de los equipos que terminen terceros en sus zonas de Copa Libertadores, por lo que para conocer a sus rivales, los clasificados deberán esperar el correspondiente sorteo.

Síntesis:

2 A. MINEIRO: Michael; Gabriel, Réver, Igor Rabello, Guga; Jair, Nathan, Guilherme Arana; Hyoran, Rómulo Otero, Di Santo. DT: Rafael Dudamel.

0 UNION: Moyano; Blasi, Calderón, J. Bottinelli, Corvalán; J. Cabrera, Méndez, Elías,  Carabajal, Milo; Bou. DT: Leonardo Madelón.

Estadio: Independencia (Belo Horizonte).

Arbitro: Nicolás Gallo (Colombia).

Goles: 16m Rómulo Otero (AM); 29m Hyoran (AM) de tiro penal.

Cambios: 46m Troyanski por Carabajal (U), 64m Bonifacio por Milo (U) y Maidana por Réver (AM), 68m Marquinhos por Otero (AM), 70m Mazzola por Bou (U), 82m Oliveira por Guga (AM).