Meses atrás, la dirigencia de Newell’s vendía a los juveniles a precio de remate por necesidad económica; ahora los mejores jugadores de las inferiores son negociados aunque no hay apremios de reunir billetes para pagar sueldos. Así se fue el año pasado Enzo Barrenechea y ahora es el turno de Juan Sforza, con destino a Barcelona en una operación que en su inicio reportará dos millones de euros y que puede llegar, según objetivos cumplidos por el jugador, a diez millones de euros.

El vicepresidente Cristian D’Amico y el manager Sebastián Peratta estuvieron el mes pasado en Barcelona pero nada relevante dijeron de las gestiones que realizaron en nombre de Newell’s. Con ambigüedades como “un futuro convenio de las inferiores del club con Barcelona” y poco más solo lograron alimentar los rumores del disparate de pensar de que en junio viene Lionel Messi al parque Independencia.

Nada dicen los directivos rojinegros porque lo que fueron hacer es vender a los mejores exponentes de las inferiores. Como ya lo hicieron con Lisandro Martínez, Milton Valenzuela, Franco Escobar y Ezequiel Unsain, quienes se fueron por pocas monedas para con esos fondos pagar gastos corrientes, como sueldos, continuaron la política de vaciamiento con Barrenechea, nuevo jugador de Juventus de Italia, y ahora es el turno del pibe Sforza.

El volante zurdo, de 18 años, viene de destacarse en el juvenil Sub 17. Tiene contrato en Newell’s hasta 2022. Pero se irá al club catalán en una transacción donde los beneficios mayores llegarán a medida de que el chico progrese en su formación. Rosario/12 pudo saber los términos del acuerdo que deben firmar los directivos de Newell’s para concretar la transacción y que tiene a Barcelona desembolsando casi dos millones de euros para que el juvenil se vaya a Cataluña. 

El contrato contempla cláusulas de compensación económica a los leprosos a medida que Sforza cumpla objetivos: entrenar con el plantel de Primera, debutar en la máxima categoría, acumular partidos junto a Messi y jugar copas internacionales. En el mejor de los casos, si Sforza triunfa, a los rojinegros le ingresarán hasta diez millones de euros por su pase. “Es una negociación muy importante, puede llegar a una cifra nunca alcanzada por el club”, confió un colaborador de la dirigencia leprosa para justificar la negociación que está en marcha.

Alertadas por el inminente anuncio que hará Barcelona sobre la compra de Sforza, las agrupaciones opositoras solicitarán información a D’Amico y requerirán que no se firma la transacción debido a que a fin de año hay elecciones en el club.

El chico Martín Belotti también está en la vidriera para ser negociado a clubes de Italia, aunque en su caso las conversaciones vienen más retrasadas.