El gremio docente UTE-Ctera y el de estatales ATE marcharon para reclamar por los problemas que enfrenta la educación pública porteña y para exigirle soluciones al jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. Entre los principales reclamos estuvo la falta de vacantes (se calcula que 24 mil niñas y niños quedaron afuera del sistema educativo) “pese a las afirmaciones falaces del jefe de gobierno en cuanto a la supuesta construcción de escuelas”, así como los intentos de cerrar el jardín del Hospital Ramos Mejía y programas del ministerio como el de medios en las escuelas. 

Los docentes también reclamaron la estabilidad laboral para los que dan clase en secundarios y superior, que vienen reclamando su titularización, así como en las áreas de Educación No Formal y Socioeducativa. Sobre los salarios, reclamaron recuperar el poder adquisitivo perdido, además del  “inmediato aumento de las asignaciones familiares congeladas en el distrito porteño desde hace más de siete años. Esta injusta e inexplicable situación hace que un trabajador o trabajadora de la Ciudad reciba como asignación por hijo o hija 270 pesos, es decir, una décima parte de lo que establece el Salario Familiar a nivel nacional”. El congelamiento de las asignaciones llega también a la  asignación por hijo discapacitado y la ayuda por escolaridad.

En la movilización, se hizo una radio abierta y luego, sobre el escenario montado frente al Ministerio de Hacienda porteño, hablaron el secretario gremial de Ctera, Eduardo López; la secretaria general de UTE, Angelica Graciano; así como el titular de ATE Capital, Daniel "El Tano" Catalano. También hablaron docentes del jardín del Ramos, que celebraron un fallo que obliga al gobierno porteño a devolver el jardín al lugar del que intentaron sacarlo y donde funcionó siempre. También se expresaron integrantes de la escuela artística Yrurtia, que vienen resistiendo el intento oficial de achicar sus instalaciones.