Alrededor de 400 argentinos que regresaban a Buenos Aires desde Uruguay quedaron en cuarentena luego de que, antes de arribar en el puerto, se confirmara que uno de los pasajeros era sospechoso de haber dado positivo por coronavirus. Por la alerta, todos los viajeros debieron permanecer alrededor de tres horas a bordo del ferry, hasta que las autoridades argentinas las trasladaron a un hotel para cumplir con el aislamiento sanitario.

El caso

El caso sospechoso fue el de un joven de 21 años, que habría llegado desde Holanda a Uruguay. Tras presentar síntomas, habría permanecido en observación en el Hospital de Clínicas de Montevideo. De allí, señalaron, salió sin conocer los resultados de los análisis y sin haber sido dado de alta para abordar el buque “San Patricio”, de Buquebus, que zarpó a las 18.30 de Colonia y arribó dos horas después a Buenos Aires. Al llegar, la tripulación del ferry informó la situación por altoparlantes al resto del pasaje y anunció que no podrían desembarcar hasta que llegaran autoridades sanitarias porteñas para organizar un operativo de cuarentena.

Una de las pasajeras dijo a un canal de televisión que “el chico estaba con otros amigos, y me llamó la atención que todos tenían unos barbijos impresionantes, mucho mayores y mejores que los que se consiguen acá, lo que daba a entender que venían de Europa”. “Lo que llamaba la atención es que algunos no se sacaban ni las capuchas y además no hablaban entre ellos, estaban callados y muy quietos”, recordó.

La mujer añadió que, poco antes de llegar al puerto de Buenos Aires, “el chico que estaría contagiado bajó del tercer piso (del ferry) y le habría avisado a las autoridades del barco lo del coronavirus, lo que generó todo el nerviosismo y el drama posterior".

De acuerdo con algunas versiones, el joven se habría enterado de los resultados de sus análisis poco antes de llegar a Buenos Aires, cuando el hospital uruguayo le envió la información por correo electrónico. El joven habría informado al capitán, que habría, a su vez, dado aviso a Prefectura.

Antes de bajar a tierra, los pasajeros fueron separados en grupos de 20 personas, y trasladados a un hotel. Algunos pasajeros ofrecieron resistencia a la medida, algo que quedó registrado por cámaras de televisión que siguieron el desembarco en vivo.

En declaraciones televisivas, el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quiros, detalló que los 400 pasajeros deberán cumplir un período de aislamiento de 14 días. La medida aplica también a las y los integrantes de la tripulación.

Esta mañana, luego del episodio, la empresa Buquebus suspendió las operaciones “por tiempo indeterminado” y “por razones de fuerza mayor”.

Mientras tanto, en Uruguay, la empresa de ómnibus en la que el joven viajó de Maldonado a Colonia informó que el vehículo que había tomado fue desinfectado con “amonio cuaternario de quinta generación”, un producto de limpieza “aplicable para el virus”.