Días antes de que la pandemia nos lleve en andas hasta el living de casa, nos deposite en un sillón y nos obligue a reformular todos nuestros hábitos, una película francesa llegaba a la cartelera de los cines de Rosario con una crítica favorable. La biblioteca de los libros rechazados, del director Rémi Bezançon, se convertía en una excelente oportunidad para acercarse, con los modos y las licencias que suele tomarse el séptimo arte, al autor del libro que inspira esa historia: el multipremiado David Foenkinos. No recomendaré la película por una razón sencilla: el aislamiento impidió que la viera. Pero si agitaré, en estas pocas líneas, el nombre de Foenkinos.

Particular y vivamente, en este momento de aplastamiento social y noticias luctuosas, uno de sus títulos: Estoy mucho mejor. No, no es un libro de autoayuda. Que no los engañe el nombre. No tiene siquiera parentesco lejano con escritos de Bucay o de Coelho, aunque leerlo puede ayudar a sanar. Con ingenio y humor, con una prosa cuidada pero al mismo tiempo liviana y fresca, por momentos escapando de las reglas formales, el francés se interna en la vida de un hombre que comienza a ser aquejado por un insoportable dolor en la espalda.

El protagonista de la novela pasa de creer que lo invade una enfermedad terminal a advertir que la dolencia, quizás, está asociada con su estado de ánimo. Comienza entonces una reconversión profunda en la que todo entra en debate: relaciones, trabajo, conflictos de antaño, gustos personales. La situación va cambiando, gira. El enfermo libera sus impulsos, se muestra más osado, cruza los límites que su educación le impuso. Deja paso a una vida nueva. Y el dolor va cediendo.

Foenkinos es músico. No parece casual si se repasa la cadencia armoniosa, pero al mismo tiempo variada, que presenta su obra. Incluye títulos premiados como La delicadeza y Charlotte o saltos al vacío como la biografía novelada de John Lennon, estructurada a partir de los imaginarios diálogos del genial Beatle con su psicoanalista. Estoy mucho mejor es otro eslabón en la carrera del autor. En ella el protagonista de la novela ve una oportunidad en medio de la crisis. Y la aprovecha. Cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.

Estoy mucho mejor. David Foenkinos, Seix Barral, 334 páginas.