Las políticas de salud pública, de ingresos –salariales y transferencias–, financieras –protagonismo de la banca pública y más y mejor crédito para las Pyme– y regulatorias –precios y monopolios– que, con distinto hincapié, están aplicando todos los países de la región, son tan urgentes y necesarias como insuficientes para fortalecer la economía latinoamericana frente a la pandemia; menos suficientes aún para prepararla para el desafío futuro de la recuperación.
El propósito de este decálogo es enunciar las principales políticas económicas, complementarias a las anteriores, que son imprescindibles para afrontar las consecuencias de la pandemia de la covid-19. No podemos permitirnos estar cruzados de brazos en este “mientras tanto” en materia macroeconómica y, por tanto, debemos iniciar acciones inmediatas que mitiguen y amortigüen, que protejan frente a los comportamientos hostiles que surgen en este contexto y que, al mismo tiempo, sirvan como base para fortalecer las economías latinoamericanas frente a los desafíos que amenazan su bienestar.
He aquí 10 propuestas:
- Condonación de la deuda externa para América Latina y el Caribe con organismos multilaterales, y reestructuración con mora de dos años de la deuda con acreedores privados.
- Suspensión parcial de remesas de utilidades, restricción a la salida de divisas y limitación a los movimientos internacionales del capital.
- Nueva política de cuotas y regulación de importaciones de bienes suntuarios para los próximos seis meses.
- Regulación de los mercados de bonos de deuda prohibiendo conductas especulativas, ganancias usurarias y la opacidad del capital.
- Sistema cambiario de bandas o administrado que inmunice las economías frente a los movimientos especulativos del capital y fortalezca las monedas domésticas y evite grandes choques devaluatorios.
- Prohibición del mercado de permutas de incumplimiento crediticio (CDS en inglés), por seis meses.
- Suspensión por un año de todos los capítulos de los tratados ADPIC (Acuerdos de Derecho y Propiedad intelectual para el Comercio) que estén relacionados con la salud y los medicamentos.
- Creación de un impuesto solidario en base a los patrimonios superiores a 500.000 dólares.
- Exigir la emisión de Derechos Especiales de Giro al Fondo Monetario Internacional, a ser distribuidos entre los países de acuerdo a la severidad de la crisis económica, y que dure hasta que los países recuperen el crecimiento del Producto Interno Bruto.
- En el sistema financiero, establecimiento de un spread bancario (diferencia entre tasa activa y pasiva de interés) máximo del 5% durante seis meses.
El viejo consenso neoliberal de Washington fracasó en infinitos lugares y en innumerables momentos. Ante esta coyuntura, es hora de recurrir a propuestas alternativas para evitar un nuevo fracaso, tanto en la gestión de la pandemia como de la recuperación.